Gimnasia cerebral

Es una serie de ejercicios creados por Paul Dennison en los años 70. Se llama gimnasia cerebral porque está orientada a estimular el funcionamiento de los dos hemisferios cerebrales. La foto muestra a una persona bebiendo agua porque, según los expertos, su presencia favorece la sinapsis, es decir, el contacto entre neuronas.
Según cuenta la antropóloga Noemí Paymal, Paul Dennison (que era especialista en dislexia infantil) adaptó la técnica de la kinesiología a los diferentes aprendizajes en los niños y adultos. La gimnasia cerebral utiliza el movimiento y otras técnicas para facilitar la integración cerebral en el sistema escolar.
“El aprendizaje, la creatividad y la inteligencia no son únicamente procesos propios del pensamiento, sino de todo el cuerpo. A medida que un bebé crece, va incorporando nuevos y específicos movimientos y su cerebro se va desarrollando en concordancia”, explica Patricia Sahade, especialista argentina en gimnasia cerebral, en una entrevista realizada por Paymal. Sahade explica que estos ejercicios pueden rencauzar la energía bloqueada remediándola, muchas veces, de inmediato. “Los niños y adultos de hoy sufren habitualmente dificultades de adaptación al medio ambiente escolar, familiar o social a causa de sus altos estándares éticos, sus sobresalientes capacidades intelectuales y, sobre todo a su alto grado de sensibilidad. Por este motivo, son propensos a generar bloqueos energéticos en sus sistemas mente-cuerpo.
El médico Karl Probst recomienda realizar al menos un minuto algunos de estos ejercicios. Basta, dice, con tocar la pierna derecha con la mano izquierda, haciendo el llamado ‘cross over’ para integrar ambos hemisferios cerebrales. Aclara que hay una gama amplia de vibraciones cerebrales como las beta, de más de 14 ciclos por segundo; las alfa, de 7 a 14 ciclos, y las theta, de 4 a 7, que son las que alcanzan los yogi (en India) después de años de meditación. Quienes llegan fácilmente a las ondas theta son genios. “Mozart vio en un instante La flauta mágica. Después, muy modestamente, dijo que solo tenía que transcribirla para que dure una hora. Mozart y Beethoven dieron testimonios que podían entrar en ese estado mental”, explica. Sostiente que todas estas técnicas, además de la meditación, organizan la mezcla de diferentes ondas cerebrales para enfocarlas en una única frecuencia. Compara: “Es como los rayos del sol, que abarcan una amplia gama. Si un lente las acumula en un punto, pueden prender fuego”.
En suma, la gimnasia cerebral sincroniza ambos hemisferios y facilita el aprendizaje. Para aprender hay que moverse.

IMPORTANTE

- El movimiento fija el conocimiento. Se recomienda iniciar el día de trabajo en los centros escolares con algunos pocos ejercicios de gimnasia cerebral. Durante el recreo se recomiendan juegos activos, como correr, saltar, etc.

- La función normal del cerebro requiere una comunicación eficiente entre sus diversos centros funcionales. Las discapacidades funcionales y de aprendizaje ocurren cuando la información no fluye libremente entre estos centros del cerebro. Los movimientos de gimnasia cerebral estimulan este flujo de información dentro del cerebro, recuperando nuestra habilidad innata de aprender.

- Cuando alguien está inmerso en una emoción intensa, como el miedo a un examen, se altera la comunicación con sus lóbulos frontales y, por lo tanto, no puede acceder a la información o a los conocimientos que ha adquirido; en ese momento parecen haber desaparecido de su cabeza.

- Los movimientos musculares coordinados activan la producción de neurotrofinas, que son sustancias naturales que estimulan el crecimiento de las células nerviosas e incrementan el número de conexiones neuronales en el cerebro.

- Mediante los movimientos desarrollamos nuestra capacidad cerebral, formando redes neuronales a través de los músculos. Es esencial para el proceso de aprendizaje permitir que los niños y niñas exploren cada aspecto del movimiento y equilibrio.

- Hay que dejar que los niños se expresen moviéndose, no obligarlos a permanecer quietos con la atención en un solo foco: el maestro. (Fuente: Pedagooogía 3.000)