En toda Bolivia hay alrededor de 2.000 enfermos renales crónicos; de ellos, el 40 por ciento necesita un trasplante. A pesar de la prohibición, hay un mercado negro de órganos. En los centros de hemodiálisis, hay quienes ofrecen sus riñones hasta en 12.000 dólares.
“Dicen ser donantes”. La presidente de la Asociación de Enfermos Renales del Hospital Boliviano Holandés, María Quispe, informó que cada semana, al menos dos personas quieren donar sus riñones a los enfermos renales, “pero en realidad son vendedores de sus órganos o quién sabe los de otras personas. Según dicen, estas personas tienen fuertes deudas con los bancos y ofrecen sus órganos”.
Esperan a los enfermos en la sala de hemodiálisis para hablar sobre las condiciones del pago y que hay incluso un regateo que varía entre 12.000 y 15.000 dólares. Tanto vendedor como comprador saben que se deben realizar exámenes previos para determinar la compatibilidad.
“Hay de todo precio hasta para el más rico, pero las personas pobres sólo escuchamos las conversaciones, con la impotencia de no contar con el dinero”.
Para toda bolivia. María Quispe dijo que un familiar le informó que en algunos medios impresos de Cochabamba también se publican avisos que ofrecen órganos en venta.
“No los he leído, pero no hace falta que les llame, hay que ver si somos compatibles, y además si lo fuéramos, no tengo el dinero para comprarme un riñón”.
Algunas páginas electrónicas suben anuncios sobre la venta de órganos, en ellos se incluyen la ciudad de residencia del posible vendedor y otros datos. Llama la atención que una gran mayoría de éstos son ofrecidos desde la ciudad de Cochabamba.
PROGRAMA DE DONACIÓN. La responsable interina del Programa Nacional de Salud Renal, Paola García, informó que el Ministerio de Salud impulsó en Santa Cruz una campaña de donación voluntaria de riñones para enfermos renales.
Esta campaña se replicará en La Paz en septiembre.
Sobre las publicaciones libres de este tipo de mercadeo, Paola García dijo que ningún tipo de medio de difusión debería prestarse a publicar esos servicios.
“En nuestro país existe la Ley 1716 de Donación y Trasplante de Órganos, donde se conocen las disposiciones para regir el proceso de donación, pero estos anuncios escapan a los esfuerzos para ofrecer la mejor salud a los enfermos renales”.
Quispe apuntó que “cuando existe un trasplante de riñón, he sabido que los cirujanos no saben si fue venta o donación, por ese previo acuerdo que el enfermo hizo con el ofertante. Un enfermo renal hace cualquier cosa”.
18.000 bolivianos entrega anualmente el Gobierno a enfermos para hemodiálisis. Antes éste abonaba esa suma.
La frase
“La vida de un enfermo renal es muy triste, en estas condiciones no podemos trabajar, los que tienen dinero compran los riñones, y para saber la compatibilidad, se demora dos meses, y para otros enfermos son pocas las posibilidades”.
María Quispe / ENFERMA RENAL DEL HOSPITAL HOLANDÉS
MERCADO NEGRO DE ÓRGANOS Y SIN CONTROL
MEDIOS IMPRESOS
En los anuncios especiales de algunos medios de difusión se ofrecen órganos.
DESDE EL EXTERIOR
Se anuncian en portales desde Estados Unidos para citarse en una fecha con el comprador en Bolivia.
EL REGATEO
Las personas que ofrecen sus riñones hacen negociaciones por el precio más ventajoso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario