¿Cómo identificar el VIH?

Sandra (nombre ficticio) a sus 6 años aparentaba la edad de una niña de 3, pues la desnutrición y las constantes diarreas que la afectaban impedían que crezca y se desarrolle normalmente.

El año pasado fue diagnosticada con VIH y a las pocas semanas falleció.

La enfermedad había afectado a toda su familia durante años de manera silenciosa hasta que su madre se embarazo y fue sometida a una prueba rápida de VIH que dio positiva. Al conocer su diagnóstico, la mujer llevó a su hija al médico y ella también dio positivo.

Durante sus seis años la niña vivió con constantes infecciones que eran tratadas con algunos fármacos que le autorecetaba la madre, ya que creía que solamente se trataba de patologías temporales. Jamás imaginó que su hija vivía con el virus desde que nació.

Cuando la niña llegó al hospital, el virus ya estaba en la última fase: SIDA, por lo que su cuerpo no pudo resistir al tratamiento. Como Sandra, otros tres menores de un año también fallecieron durante la gestión pasada.

La infectóloga del Hospital del Niño Manuel Ascencio Villarroel y responsable del Programa VIH-SIDA, María Elena Calderón, indica que los primeros fallecimientos en niños se dieron porque fueron diagnosticados en una etapa en la que el virus ya había avanzado demasiado.

“Es difícil que un padre piense que su hijo tiene VIH, pero varios niños han sido diagnosticados con el virus por las frecuentes infecciones que tenían”, cuenta.

INFECCIONES

Las infecciones frecuentes como diarreas o neumonías en los niños no son patologías normales y deben ser un signo de alarma para los padres.

“La infección más marcada es la diarrea, que no debe durar más de tres o cuatro días, si esto se extiende y se presenta de manera frecuente el niño puede tener otra enfermedad”, indica Calderón.

Otra de las denominadas enfermedades oportunistas que se presenta de manera frecuente cuando existe el VIH es la neumonía. Si un niño presenta un promedio de tres neumonías por año podría también estar viviendo con VIH.

El bajo peso en los niños y las anemias también son una señal para poder identificar la enfermedad. Agrega que los padres deben llevar a los menores a un centro médico cuando éstos no tienen apetito y su peso no es el adecuado para su edad. En algunos casos, la enfermedad también impide el desarrollo normal del habla en los pequeños.

Calderón manifiesta que en algunos casos el niño con VIH también puede desarrollarse de manera normal y no presentar estos síntomas. Explica que todo depende de la carga viral que tenga la madre en el momento de la transmisión al niño.

El VIH es un virus que ataca el sistema de defensa natural que tiene el cuerpo humano y posibilita la presencia de infecciones.

Los derechos de estos niños

Al igual que sucede con las personas adultas, los niños con VIH también están protegidos por la Ley 3729 de Prevención del VIH -SIDA, protección de los Derechos Humanos y Asistencia Integral Multidisciplinaria para las Personas que viven con el VIH-SIDA.

La normativa reconoce el derecho a la vida, la salud y la seguridad; a la igualdad ante la Ley y a no ser discriminados por vivir con el VIH-SIDA.

Los niños también tienen derecho a recibir los servicios de salud adecuados y oportunos para la prevención, el tratamiento integral multidisciplinario, acceso a análisis laboratoriales, medicamentos antirretrovirales y tratamiento para enfermedades oportunistas que se presenten.

Se debe respetar su privacidad, manteniendo la confidencialidad de su estado serológico y prohibiendo las pruebas obligatorias, siempre que no se afecte a terceras personas.

Deben recibir educación e información neutra, científica y oportuna sobre el VIH-SIDA y sus implicaciones.

Tienen derecho a la educación y no se les podrá impedir de ninguna manera el acceso a los servicios educativos.

Las niñas y niños cuyo padre o madre o ambos han fallecido a causa de enfermedades asociadas al VIH-SIDA, tienen derecho a recibir atención gratuita multidisciplinaria, asistencia social y apoyo terapéutico para desarrollar sus vidas de forma normal.

¿Qué haría si su niño tiene VIH?

Carola Cadima

Secretaria

Tal vez reaccionaría mal si me enteraría que la transmisión fue por falta de protección con su pareja, pero de cualquier forma los apoyaría y cuidaría de ellos para que puedan hacer una vida normal.

Creo que es una enfermedad en la que la persona afectada debe contar con el apoyo de las personas que lo quieren.

MarÍa Moyano

COMUNICADORA SOCIAL

La verdad no se qué haría si mi niño tendría VIH. Creo que si le diagnosticarían positivo sería porque yo también lo tengo, ya que los niños sólo se transmiten por la madre y suponer esa situación es muy difícil parauna mamá.

Pero si fuera el caso, trataría de asumir la enfermedad con responsabilidad y me informaría para buscar un tratamiento que pueda mejorar mi estado de salud y la de mi hijo.

Alejandra Campos

FUNCIONARIA PÚBLICA

Lo primero, buscaría información detallada sobre la enfermedad consultando a los profesionales. Asimismo, acudiría a un médico para que mi hijo sea atendido y reciba el tratamiento correspondiente.

Creo que vivir con la enfermedad o tener un familiar con ella sería una constante preocupación como madre.

Solange Terrazas

OdontÓloga

Creo que sería una noticia muy fuerte, pero yo lo apoyaría en todo momento y le explicaría la situación si es que está en una edad en la que la puede comprender la enfermedad. Posteriormente, afrontaría junto a él para que ambos podamos llevar adelante un vida normal. Pero también tendría miedo a que sea discriminado.