El coordinador de redes urbanas y rurales del Sedes, Marco Colque, afirmó que ese porcentaje significa que 104.417 mujeres se hicieron la prueba; sin embargo, no todas vuelven a recoger los resultados por la demora que existe, ya que “se entrega después de una semana”.
Para Colque, el número de exámenes aumenta cada año, ya que cada vez hay más mujeres jóvenes que acuden a los centros por la prueba, “pero eso depende del nivel de educación, porque hay mujeres que creen que si se realizan ese tipo de pruebas irá en contra de sus creencias y tienen un choque cultural, por eso rechazan o postergan hacerse el chequeo”.
Otro problema es que, en algunas ocasiones, su pareja no les permite realizarse la prueba. No obstante, hay algunas estrategias que ayudan a que las mujeres mayores acudan al examen a través de agrupaciones.
Colque comentó que en 2010 se fijaron la meta de cubrir, por lo menos, al 20 por ciento de la población, pero no se logró. Cada año, empero, las consultas aumentan en más del 10 por ciento fijado en un número de 2.000. Por ejemplo, comentó, “en el municipio de La Paz se cubrió a 50.514 mujeres el año pasado, lo que significa el 21,2 por ciento de la población, cifra que sobrepasó la meta. En El Alto se llegó a 39.543 mujeres, el 14,8 por ciento, y en el área rural se hicieron 14.560 muestras, el porcentaje menor, porque sólo cubrió el 6,3 por ciento”.
El papanicolaou es un examen histopatológico que ayuda a detectar precozmente el cáncer de cuello uterino, una de las primeras causas de muerte de las mujeres en edad reproductiva, así como también para la detección de infecciones de transmisión sexual (ITS).
Colque explicó que hasta hace dos años y medio, la entrega de los resultados de las pruebas tardaba más de “dos meses, por eso las mujeres se aburrían en la espera”.
Reconoció que ésa fue una de las dificultades que tuvo el departamento, ya que todos los exámenes del área rural y urbana se enviaban a los laboratorios del Hospital de Clínicas. “Creamos una red del mismo laboratorio del nosocomio y, además, del Instituto Nacional de Laboratorios de Salud (INLASA) para que también haga la lectura de los exámenes, y ahora tardan sólo una seman.
Hay otra red en El Alto que permite devolver las pruebas en un tiempo menor. La norma médica indica que cuando la mujer ha iniciado su actividad sexual debe hacerse el examen por lo menos una prueba anual, y cuando tiene infecciones (ITS), dos veces al año.
Para destacar
En los años 90, el Servicio Departamental de Salud realizó una concientización a las mujeres para que se hagan la prueba.
El 2000, la población meta para aplicar el examen fue del 10 por ciento entre mujeres de 20 a 64 años.
Para el 2010, la meta cambió al 20 por ciento del mismo colectivo, ya que sobrepasó el 10 por ciento anterior.
Actualmente, la población femenina con un grado medio de educación accede a realizarse la prueba.
En el municipio de La Paz se sobrepasó la meta, pues llegó al 21,2 por ciento de las mujeres en edad fértil.
En el área rural, las mujeres de Caranavi se hacen más pruebas. En otras zonas, la dispersión de la población dificulta el acceso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario