Ante la detección de un caso sospechoso de gripe A H1N1 en la ciudad de Yacuiba, los galenos realizan la atención ambulatoria por toda la zona, sin embargo, en este momento no hay vacunas para atender a los pacientes, según informó el epidemiólogo del hospital Rubén Zelaya, Oscar Aliaga Angulo, por lo que la Gobernación, a través del jefe de Área de Salud, Fabián Audiberth, convoca a las entidades relacionadas con el terma para definir medidas concretas y esfuerzos a fin de evitar la presencia de casos en esta jurisdicción. “Ante un caso sospechoso, se atiende de manera ambulatoria pero, lo más preocupante es en este momento, no hay vacunas suficientes en el país para atender en casos del brote de la enfermedad” lamentó Aliaga, a tiempo de indicar que en este caso no pasó a mayores, sin embargo, se continúa con la vigilancia epidemiológica en forma preventiva.
El Comité Hospitalario de Vigilancia Epidemiológica se reunió y organizó para atender preventivamente a los pacientes con resfrío y gripe. “Se les tomará muestras a los pacientes más comprometidos con su salud para hacer el tratamiento y vigilancia epidemiológica en forma preventiva, porque no hay vacunas para atender a los pacientes”, manifestó.
Asimismo, se acordó abrir un consultorio especial para atender a los pacientes que presentan fiebre y con cuadro clínico gripal, siguiendo las recomendaciones básicas con el lavado de las manos, estornudar en la flexura del codo y el uso de alcohol en gel en los lugares donde existe aglomeración de personas, entre otras recomendaciones evitar los lugares donde se presentan espectáculos públicos.
Audiverth señaló estar convocando a la población a asumir medidas de protección concretas como evitar lugares de concentración de público, lavarse las manos con alcohol, obviar saludar con la mano o un beso, usar pañuelo o el brazo para estornudar y lavarse las manos por lo menos veinte veces al día y durante un minuto cada vez.
Según los técnicos del área, los síntomas son similares a los de la gripe estacional, incluyen fiebre muy alta (38 y 40º), tos seca recurrente, dolor de garganta, moqueo o secreción nasal, dolores en el cuerpo, dolor de cabeza, escalofríos, fatiga, dolor en los ojos, pérdida del apetito, problemas para respirar como falta de aliento, hasta puede ocasionar en algunos casos vómito y diarrea.
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