Qué hacer en caso de emergencia

En situaciones de riesgo, los primeros auxilios son lo primordial para tomar el cuidado oportuno y necesario para las víctimas, de acuerdo a su gravedad y con el fin de mantener su salud estable.
Primeros AUXILIOS que salvan

El destino de un herido depende generalmente de los primeros cuidados que se le puede dar después de un accidente. En ausencia de un médico, los testigos tienen un rol importante, los cuales deben tener un conocimiento sobre los primeros auxilios con el fin de implementar adecuadamente los mismos y evitar ciertos errores.

PARO CARDÍACO

En caso que la víctima esté inconsciente y su respiración no está en los niveles normales, sacúdela suavemente y llama rápidamente a una ambulancia. En el tiempo de espera de la misma, coloca la cabeza de la persona hacia atrás y empieza la reanimación cardiopulmonar a través de masajes cardíacos, los cuales se basan en compresiones en el pecho e insuflaciones en la boca.

BOCA A BOCA

Cuando una persona deja de respirar o lo hace con dificultad, el boca a boca es de suma importancia. Arrodíllate al lado de la víctima, cerca de su cara. Con una mano en la frente, mantiene inclinada la cabeza hacia atrás y con la otra, sostiene la mejilla hacia arriba. Obstruye su nariz y coloca tu boca junto a la de la persona. Insufla progresivamente. Su frecuencia debe ser entre 6 y 8 insuflaciones por minuto.

QUEMADURAS

No importa qué tipo de quemadura sea, lo primero es efectuar un enjuague de la zona durante aproximadamente 5 minutos. Saca la ropa que está en contacto con la herida, exceptuando esta acción cuando la prenda se haya adherido a la misma. En caso de quemaduras de mayor grado, es importante acudir directamente a emergencias.

LUXACIÓN

La más frecuente es la del hombro. El diagnóstico es evidente, ya que la víctima se presenta con el hombro dislocado y con una deformidad. Antes de mover al paciente, se debe inmovilizar esta parte, colocando una bufanda, la cual servirá de apoyo al brazo. Esta técnica reducirá el dolor y ayudará a trasladar a la persona a un hospital.

ASFIXIA

En estos casos, sostiene el tórax con una mano e inclina a la persona hacia delante. Efectúa 5 golpes en su espalda entre los dos omóplatos. Si éstos son ineficaces, realiza compresiones abdominales, colocándote detrás de la víctima, pasa tus brazos debajo de los suyos para que tus manos lleguen al abdomen y ejerce fuerza sobre el mismo. Esto permite sacar lo que obstruye el flujo respiratorio.

HERIDAS

La persona que vaya a auxiliar al herido debe tener las manos limpias para evitar cualquier posible infección. Luego, se debe limpiar la herida con abundante agua. Aplica una solución antiséptica cutánea y procura no manipular la zona afectada. Termina colocando una compresa esterilizada, la cual cambiarás a diario. Sin embargo, la herida tiene que ser revisada por un especialista y que el paciente tenga la vacuna contra el tétanos.

PiCADURAs

Generalmente, luego de una picadura aparece un edema doloroso limitado a la zona afectada. Es importante sacar el aguijón de la piel con una pinza y calmar los dolores con una crema antiinflamatoria o antiséptica. En caso de picadura en la boca, acude a un médico, ya que el edema puede impedir la respiración. Si se desarrolla una reacción alérgica se necesita un tratamiento de emergencia para realizar una inyección.

FRACTURAS

El miembro fracturado puede estar deformado, hinchado o presentar un hematoma. Es primordial inmovilizar la zona afectada, ya que esto evita la agravación de la fractura. Para esto, coloca una bufanda para sostener el miembro y llama directamente a un médico. Nunca decidas mover a la víctima, ya que puedes empeorar su situación.

SANGRAMIENTO

No importa qué tipo de sangramiento sea, hay que recurrir a gestos básicos para controlarlo. La compresión manual consiste en apretar la herida con la palma de la mano, ejerciendo fuerza. Luego, ayuda a la persona a ponerse de forma horizontal. Sigue comprimiendo la herida hasta que lleguen los auxilios. Piensa en abrigar, cuidar y tranquilizar a la víctima para reducir posibles molestias.

MORDEDURAs

Limpia la herida con abundante agua y por varios minutos, desinfecta con un antiséptico y cúbrela con una compresa estéril. Es importante observar al animal que haya mordido con el fin de evitar el riesgo de contraer la rabia u otras enfermedades. El médico evaluará la gravedad de la mordedura y la posibilidad de administrar las vacunas pertinentes. Además, prevendrá posibles infecciones.

INCONsCIENCIA

En una víctima inconsciente que respira, los riesgos mayores son la caída de la lengua y la inhalación de líquidos, los cuales pueden provocar una obstrucción de la respiración. Para evitar estos episodios, coloca a la persona de lado y jala suavemente su cabeza hacia atrás. Controla continuamente la ventilación del paciente y espera la llegada del médico.

AHOGAMIENTO

En primer lugar, acuesta a la víctima en el suelo. Si está vestida, suelta todas las prendas que están alrededor de su vientre y cuello. Con una mano, mueve su cabeza suavemente hacia atrás y su mejilla hacia arriba con el fin de evitar la obstrucción de la respiración. Luego, abre su boca y averigua que respire. Realiza un masaje cardíaco combinado con insuflaciones.

DE UNA PRONTA ASISTENCIA PUEDEN DEPENDER MUCHAS VIDAS

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F. Andres Sabat

Editor Salud

Los primeros auxilios son los principales cuidados dispensados a una persona herida o enferma, utilizando el material que uno tiene, antes de la intervención de un equipo médico. Éstos permiten mantener con vida, prevenir mayores heridas y favorecer el restablecimiento de las víctimas. Cada día, muchas personas sufren de accidentes diversos, los cuales ponen sus vidas en riesgo o provocan discapacidades. Cuando estamos en frente de una situación dramática, conviene alertar directamente a los servicios de emergencias. Desafortunadamente, numerosos y preciados minutos transcurren generalmente entre el momento en el cual el accidente se produce y la intervención de los auxilios profesionales. Por eso, aprender a dispensar los primeros cuidados permite asegurarse de reaccionar correctamente frente a situaciones de emergencias.

Proveer una ayuda óptima a las victimas pasa en tener siempre un botiquín en correcto estado, ya sea en la casa, en el auto, en el trabajo, en las vacaciones, entre otros. Para mantener los medicamentos, se debe guardar el botiquín en un lugar seco y remplazar frecuentemente el contenido utilizado o vencido. Según los consejos de la Cruz Roja, éste debe imperativamente contener compresas estériles de varias dimensiones, cinta adhesiva, vendas en rollo para efectuar vendajes o para inmovilizar un miembro en caso de luxación o fractura, tijeras, ganchos y pinzas. Es también indispensable tener guantes desechables, alcohol y antisépticos.

Cada ciudadano debe aprender a dispensar primeros auxilios, ya que estos gestos pueden tener una importancia decisiva durante la espera de los profesionales. Algunos organismos y servicios públicos como los bomberos por ejemplo, proponen formaciones para aprender los cuidados esenciales. Por otro lado, es también posible obtener informaciones a través del Internet. Es importante conocer los gestos básicos de cómo socorrer a una persona para poder ser útil en caso de accidentes y poder salvar vidas.