Peligros de la flebitis

“Las várices me aquejan desde mi tercer embarazo, porque subí mucho de peso y se acentuaron más porque trabajo en peluquería hace de 30 años. Al principio no sentía dolor, pero sí cansancio. Escapé de 3 cirugías y con los años el problema provocó hinchazón de mis pies y tobillos, se ponían calientes e intocables como si fueran a reventar”, dijo Tina Soliz una paciente que padece de várices de grado cuatro.

Éste es el testimonio de una mujer de 44 años que padece várices avanzadas, y si no recibe un tratamiento podría derivar en una flebitis (inflamación de las venas), pasar a una necrosis y posterior amputación de la pierna. Uno de muchos casos en que las personas están resignadas a vivir con este mal por temor a cirugías y desconocen el procedimiento de la crioescleroterapia, que ha demostrado ser efectiva.

Las várices, por su tamaño y aspecto, se dividen en 4 grados: El primero tiene la apariencia de arañitas, en el segundo las venas se vuelven más visibles, el tercero cambian de color de rojo a pardo con dolor e hinchazón y en el cuarto se atrofia el tejido, aparecen ulceras y flebitis superficial, entre otros síntomas difíciles de tratar.

Femenina conversó con el flebólogo de Arias Medical Clinic, Luis René Arias Villarroel, quien radica en México hace 25 años y que llega una vez al mes (1 al 5 de junio) para realizar una campaña con la aplicación de este novedoso procedimiento. Además tiene planificado atender hasta noviembre del 2016 a 20 mil personas que padecen várices.

“La diferencia entre un proceso quirúrgico y la crioescleroterapia, consiste en que el primero arranca el problema colateral, pero no lo soluciona a diferencia del segundo que resuelve el padecimiento en forma segura, efectiva, rápida, económica y estética. Método que aplicaré hasta el 8 de noviembre del 2016, fecha en que dejaré de trabajar para realizar un viaje en motocicleta por el mundo”, enfatizó Arias.

El especialista puntualizó que en poco tiempo cumplirá 50 años y dejará de atender pacientes para cumplir uno de sus sueños, el viajar por el mundo en una motocicleta Harley. Pero antes de hacerlo quiere transmitir sus conocimientos a los médicos interesados en incursionar en la especialidad, para que puedan hacerlo con la población boliviana.

“Estoy consciente de que tengo muy poco tiempo para atender a tantos pacientes, por esta razón deseo transmitir mis conocimientos a quienes estén interesados en aprender. Ya capacité a 3 médicos de planta en Cochabamba y una doctora en La Paz, tengo 18 meses para montar una red de servicios médicos que esté al alcance de cualquier persona”, explicó Arias.

MITOS

El flebólogo boliviano aseguró que existen ciertos mitos relacionados con esta enfermedad, así como malas prácticas que en lugar de favorecer el tratamiento de este problema lo acentúan y empeoran el cuadro clínico que con el paso de los años avanza hasta llegar a una amputación de la pierna o que es peor la muerte.

“Uno de los principales mitos es que las várices se producen por el uso de zapatos de tacón, cuando éstos moldean las piernas y previenen el descenso de matriz y por tanto el control de esfínter. Además del uso de las famosas medias para várices que hace un torniquete y empeoran el cuadro, que si son utilizas deben ser personalizadas, a medida del paciente y con receta médica”, dijo Arias.

También se tiene la creencia común de que sólo a las mujeres les aqueja este problema, siendo que los varones como no asisten a consultas regulares no detectan está dificultad a tiempo y muchos de los casos tratados en anteriores campañas han demostrado que ellos sólo visitan al médico cuando ya tienen mucho dolor.

“He notado que cuatro de cada diez personas son varones y que cuando llegan a la valoración el caso es grave, porque ya no pueden caminar, sus piernas están negras y les duele mucho, a diferencia de las mujeres que desean verse bien con vestido y asisten al médico cuando las molestias comienzan a afectar su vida”, explicó el

especialista.

FLEBOLOGÍA

El flebólogo aseguró que muchas personas no quieren aceptar que esta enfermedad es hereditaria al igual que la hipertensión, y que factores como embarazos, consumo de hormonas y una posición prolongada de pie o sentada de acuerdo con la actividad que se realice a diario favorecen su aparición.

“La flebología es la parte de la medicina que se encarga de la parte circulatoria, en especial de la circulación venosa y linfática, hay especialistas que atribuyen la inflamación de los pies a un problema renal, siendo que podría tratarse de uno diurético perteneciente al orden linfático que estaría dañando ciertos tejidos”, dijo Arias.

En el caso de Tina, con una várices avanzada, estaba comenzando a aparecer los primeros síntomas de flebitis, que consiste en una inflamación venosa que causa dolor, sensación de calor, un ardor como si algo quemará y en ocasiones comezón.

“En el caso de esta paciente, el tratamiento de crioescleroterapia comenzó en la anterior campaña y en las próximas publicaciones se verán los primeros avances con este procedimiento que resolverá el problema sin cirugía y eliminará las molestias que tenía en un principio”, finalizó el especialista.