La importancia de los cuidados después de una cirugía abierta son vitales para lograr una recuperación pronta y sin complicaciones, la alimentación necesaria, el cumplimiento del tratamiento de los medicamentos y los controles regulares contribuyen con este propósito.
Evite las complicaciones
siguiendo al pie de la letra las indicaciones post operatorias del médico. El mantener la herida operatoria protegida, utilizando una faja, le dará seguridad en la ambulación sin tirar los puntos o lastimar al hacer algún movimiento.
La herida quirúrgica después de una operación debe estar limpia y seca, no debe existir sangrado, ni presentar secreción amarilla o verdosa ni mal olor, recuerde que no debe manipular la herida porque la piel de las manos alberga microorganismos.
Las curaciones, la frecuencia y tiempo de las mismas serán por indicación del cirujano o enfermera profesional.
Así también el dolor de la herida operatoria deberá desaparer paulatinamente día a día, en caso de aumentar deberá consultar con su médico para su valoración.
Posteriormente vendrá el retiro de puntos que generalmente no podrá sobrepasar los 7 días. Antes y después del retiro de puntos no podrá realizar actividad física de intensidad, es decir, ir al gimnasio o hacer cualquier tipo de deporte hasta el mes de post operatorio evitando la dehiscencia de puntos o abertura de la herida.
El tiempo de reposo es relativo, esto dependerá del tipo, gravedad de la cirugía y de persona a persona. Recuerde que la herida no es sólo en la piel, sino también en los músculos y órganos internos.
Otra posible complicación frecuente es el denominado queloide, el cual endurece la piel, la cicatriz comienza a crecer, se la reconoce con anticipación cuando está permanentemente rojiza asociada a escozor y no toma la coloración blanquesina normal con el tiempo. Este tipo de complicación se puede prevenir y tratar con medicamentos como los corticoides en crema.
Alimentación post operatoria
Generalmente, los primeros días debe ser una comida blanda con mucha fibra para evitar el estreñimiento, abundantes líquidos no gaseosas ni comida chatarra.
El consumir alimentos que contienen vitamina C y antioxidantes que ayudan en la cicatrización, como ser: naranja, limón, toronja, lima, kiwi, pimiento rojo o verde, tomates, espinaca, brócoli, fresas, pimientos verdes, melón y papaya que evita el estreñimiento.
Por último la vitamina K que se encuentra presente especialmente en el perejil, mejorará en gran parte los transtornos de coagulación favoreciendo la cicatrización.
Con estas recomendaciones evitaremos las posibles complicaciones y nuestra recuperación será pronta.
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