Alergias pueden manifestarse por primera vez durante el embarazo

Con dos meses de embarazo Katiuska Antezana comenzó a presentar una alergia en todo su cuerpo. De los brazos a los pies las molestas erupciones cutáneas fueron llenando su cuerpo.

Luego de un análisis se le diagnosticó alergia, molestia con la que deberá lidiar los cuatro meses más de gestación que le restan para dar a luz.

Según la dermatóloga Ana Fiandor, las enfermedades alérgicas son propias de personas jóvenes y en edad fértil, por lo que es frecuente que las padezcan por primera vez mujeres embarazadas y en período de lactancia.

Cuando este cuadro se presenta, se recomienda buscar el bienestar de la mujer sin riesgo para el bebé, ya que cualquier enfermedad que padezca la madre, si no está debidamente controlada, supone un doble riesgo, puesto que afecta a ambos.

La embarazada precisa una atención especial, aunque las reacciones alérgicas de esta obedecen a las mismas causas y se producen por los mismos mecanismos que las de la población en general.

SÍNTOMAS

La reacción más frecuente es la irritación de la piel y de las membranas mucosas. También pueden ser síntoma de alergia los catarros, la acidez de estómago o las diarreas.

Ante cualquiera de estas molestias, la primera medida es consultar con el médico para que, mediante determinadas pruebas, determine el origen real del problema.

CAUSAS

Entre los posibles factores que desencadenan las alergias durante el embarazo están; el polvo, el polen, algunos olores fuertes como el cloro, detergentes para lavar ropa y perfumes, cremas o sprays que se usan para el cuerpo.

Durante la etapa de gestación se recomienda además, el lavado frecuente de las manos para así evitar el contagio con el virus de la gripe y prevenir los molestos resfriados.

Tratamiento

El tratamiento de las enfermedades alérgicas tiene tres pilares: el primero son los medicamentos, el segundo las vacunas antialérgicas (inmunoterapia específica) y el tercero el control ambiental. La terapia contra las enfermedades alérgicas de las embarazadas es prácticamente igual al utilizado en el resto de la población, pero hay que escoger los medicamentos con cuidado, eligiendo aquellos que sean seguros para la madre y el feto y no traigan problemas en el proceso de gestación.