A partir del próximo 1 de mayo estará prohibido fumar en los lugares públicos cerrados de China, de acuerdo con un nuevo reglamento divulgado ayer.
Hoteles, escuelas, teatros, museos, salas de espera de estaciones ferroviarias y aeropuertos, entre otros muchos sitios que entran en esa clasificación, deberán estar “libres de humo” y los propietarios de empresas tendrán una responsabilidad clara en ese sentido.
El documento, emitido por el Ministerio de Salud Pública, establece que entre las tareas de estos últimos está realizar campañas antitabaco e instar a sus empleados a disuadir a otros de fumar.
La normativa también exige que las áreas al aire libre donde se permite ese hábito no pueden obstruir las zonas peatonales, y las máquinas expendedoras de tabaco deben estar excluidas de lugares públicos.
Un informe divulgado a principios de año y elaborado por 60 expertos indica que alrededor de 300 millones de ciudadanos de este país, el 28% de la población, son fumadores regulares y 740 millones, incluidos 182 millones de niños, se clasifican como pasivos.
China ratificó el Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco en 2003. Una vez que entrara en vigor ese tratado -lo hizo en 2006-, China debía prohibir fumar en todos los lugares públicos cerrados en un período de cinco años.
La nación asiática prometió aplicar medidas para controlar con efectividad el tabaquismo, entre ellas la ley antitabaco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario