Santa Cruz es la región que supera el promedio nacional de personas afectadas por diabetes, hipertensión, obesidad y cáncer, enfermedades de países modernos y desarrollados. Las cifras estimadas en los últimos años alertan que la capital cruceña reporta un 10,7% de gente con diabetes, 22,8% con hipertensión y 30,3% con obesidad, mientras que el promedio nacional alcanza a: diabetes, 7%; hipertensión arterial, 17,9%; y obesidad, 21,8%.
Roberto Tórrez, director departamental de Epidemiología, explicó que preocupa que las cifras locales superen a las nacionales, especialmente la diabetes tipo 2, generada por transgresiones alimentarias, la obesidad y el sedentarismo. Este mal afecta a un 63% de las mujeres y 37% de los varones.
Los cánceres también afectan a un gran número de la población cruceña, especialmente el de cuello uterino, el de mama (mujeres) y el de próstata (varones). Del mismo modo, la obesidad, provocada por hábitos alimenticios inadecuados, como el consumo de comida ‘chatarra’, inactividad física y bajo consumo de verduras.
De acuerdo con los especialistas, antes los problemas que más aquejaban a los cruceños eran los transmitidos por vectores y aquellos contagiados de persona a persona. Hoy, por la inactividad y la mala alimentación, la situación está variando.
Y, ¿cuáles son los males que más aquejan a los bolivianos? Según el informe de Jhonny Vedia, director general de Servicios de Salud, del Ministerio de Salud, en primer lugar están los males cardiocirculatorios (hipertensión, angina de pecho y accidentes cerebro- vasculares), con un 13,72%; le siguen las neoplasias (cánceres), con 11,34; causas externas de morbilidad y mortalidad, con 10,79%; afecciones originadas en el periodo perinatal, con 10,19%; problemas digestivos, con 10,18%; problemas respiratorios, con 9,92%; males infecciosos, con 9,54%, y las endocrinas y nutricionales, con 6,74%.
Recomendaciones
Plato boliviano. El plato de comida debe contener la cuarta parte proteínas, la otra cuarta parte carbohidratos y la mitad verduras. Inculque en su hogar hábitos alimenticios saludables.
Actividad física. Tratar de caminar 30 minutos diarios, utilizar menos el transporte público o vehículo particular, hacerlo a pie.
Rutina. No esperar sentirse mal o con dolor para acudir al médico. Hágase un chequeo rutinario para saber cómo está su presión, su peso y sus triglicéridos y colesterol.
Bomba de tiempo. Los kilos de más son como una bomba de tiempo, pues las investigaciones médicas han determinado que el aumento de peso incrementa el riesgo de enfermedad del corazón, diabetes, embolia y cáncer de mama en las mujeres y eleva el peligro de infarto.
Actitud. La experiencia muestra y enseña cómo pequeños cambios en el comer pueden hacer la diferencia.
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