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domingo, 12 de mayo de 2019

Las lesiones más frecuentes son por estado del terreno y contacto

Corre el minuto 14 del complemento, Caleb Cardozo disputa un balón con Christian Árabe, pierde en la lucha, cae y se observa que su pie derecho no estaba en su lugar. Los jugadores que están cerca se desesperan y piden auxilio de los galenos de Aurora, que ingresaron inmediatamente en el duelo que disputaban ante Always Ready, el pasado 4 de mayo. Más de un jugador queda estremecido por lo que se vio, Caleb sufrió una luxofractura del tobillo derecho y surgen las interrogantes por lo que sucedió, pero sobre todo el motivo.

Alex Antezana, médico del club Wilstermann, asegura que en el fútbol se dan este tipo de lesiones por el contacto que se tiene, es más, apunta a que en este torneo de la División Profesional se dieron varias lesiones que son consideradas de gravedad, principalmente por lo que implica para un jugador.

En las últimas semanas, a la lesión de Cardozo se suman la doble fractura de tibia y peroné que sufrió el jugador de Royal Pari, Matheo Zoch; la del futbolista que milita en Bolívar, Jorge Enrique Flores, que se fracturó la tibia y el peroné en la primera fecha del torneo Apertura en el partido que su equipo jugó contra Wilstermann, en Cochabamba, y la fractura de tibia que sufrió Augusto Andaveris, de Always Ready,

“En el fútbol, al ser un deporte de contacto, este tipo de lesiones son pausibles a que sucedan, debido al contacto que hay entre los deportistas. El caso de la lesiones de Augusto Andaveris y de Matheo Zoch, pueden ser situaciones del momento del partido, es difícil de evitar y prevenir, esto es muy frecuente de poder encontrar”, aseguró Antezana.

El médico especialista señaló que las lesiones de este tipo se pueden dar por muchos motivos, entre los que figuran la indumentaria deportiva (zapatillas para fútbol) y también el campo deportivo. Antezana comentó que se lleva a cabo un estudio sobre la incidencia del tipo de zapatillas en las lesiones, específicamente en la rotura de ligamento cruzado anterior.

El médico explicó que después del Mundial de Alemania en 2016, por diversos factores entre los que se destaca la decisión de las marcas y las publicidades, el tipo de toperoles ha cambiado.

“Ahora tienes diferentes tipos de formas, colores. Un estudio que estamos realizando sobre la incidencia de lesiones de ligamento cruzado anterior en relación de esa época a la actual, se ha incrementado mucho, principalmente se está considerando que puede ser el uso del zapato deportivo.

El ligamento cruzado es una estructura que se rompe muy frecuentemente en los jugadores de fútbol y se ha visto que hay una incidencia, en especial en estos últimos años por el número de lesiones de este tipo. Esto puede estar relacionado con el zapato deportivo, porque antes los toperoles eran circulares, ahora son rectangulares. Lo que pasa con eso es que te quedas enganchado en el terreno, prácticamente es como una estaca y el movimiento de rotación va a ser de mayor impacto, que va a dar lugar a una ruptura de ligamento cruzado”, sostuvo.

Antezana detalló que existe mayor facilidad de rotación cuando el toperol es circular e incluso en este último periodo se pudo constatar que las empresas que se dedican a elaborar indumentaria deportiva están retomando este tipo de base en las zapatillas.

“En el caso de Caleb, si se ve bien la imagen, él va hacia la pelota, se queda enganchado en el piso. Eso puede estar relacionado desde la misma indumentaria deportiva, los cachos, el terreno deportivo que pueden ser elementos que puedan dar lugar a este tipo de lesiones”, sostuvo.

A estos dos aspectos se suma que actualmente muchos jugadores ya no se vendan los tobillos, tomando en cuenta que hace unos años atrás, los futbolistas optaban por usar vendajes para evitar esguinces o lesiones importantes de tobillo.

Las más frecuentes


Los antecedentes señalan que hay lesiones que son más frecuentes en el fútbol. Las roturas de ligamento cruzado y las fracturas han sido las dos lesiones recurrentes que se han presentado en este torneo.

Hasta la fecha 22, fueron dos situaciones las que estremecieron al fútbol nacional. La doble fractura de tibia y peroné que sufrió el volante de Royal Pari, Matheo Zoch, y la luxofractura que tuvo el lateral de Aurora, Caleb Cardozo, fueron los episodios que sorprendieron a la afición futbolera por la gravedad de la situación.

Las roturas de ligamento cruzado fueron otras dos lesiones que volvieron a darse en el fútbol nacional. El agravante en esta situación es que en caso de dos jugadores, las mismas son reincidentes, por lo que, de acuerdo a la explicación del especialista Antezana, el tiempo de recuperación llega a duplicarse.

Son varios factores los que inciden, al final, para provocar una lesión grave que deja a los futbolistas fuera de competencia durante varios meses.

Los cuidados deben darse desde la indumentaria deportiva que resulta ser un aspecto esencial para cada futbolista profesional.

APUNTE


Lesiones del cartílago articular

A las lesiones que son consideradas más frecuentes, se suma la lesión del cartílago articular, misma que comienza a verse después de siete años de actividad deportiva. Según el médico Alex Antezana, en ese caso se puede complicar cuando se presentan lesiones a nivel de los meniscos.



Cuando hay cirugía de los meniscos se puede proceder a remodelados o reparaciones, aunque se debe hacer una evaluación para evitar un desgaste más rápido del cartílago articular, que en estas situaciones puede verse afectado.



DE PRIMERA MANO


Campos de juego también afectan

Los factores que inciden en las lesiones también abarcan a los campos de juego. Si bien en cuanto al estadio Félix Capriles se refiere, el césped tiene más de 30 años, las condiciones aún son buenas, según declaró el director del Sedede, Javier Villalobos.



Lo que queda claro es que, luego de hacer el “workshop” con la Conmebol que se realizó en el estadio Olímpico Bicentenario de Villa Tunari, para el cuidado de los campos de juego, existen especificaciones a cumplir para recibir los torneos internacionales.

Algunas lesiones son reincidentes


El médico de Wilstermann, Alex Antezana, dijo que las lesiones de gravedad pueden ser reincidentes, situación que se puede dar por varios motivos.

En el caso específico de Omar Morales, lateral del Rojo, la rotura de ligamento cruzado anterior se repitió y ahora, casi 11 meses después de su segunda lesión, el jugador recién está retornando.

Antezana detalló que, cuando se trata de lesiones de este tipo, no se puede dar tiempos aproximados de rehabilitación, sobre todo porque se debe priorizar que el jugador esté en las mejores condiciones para jugar.

El especialista señaló que ésta es una de las más “incapacitantes” para los jugadores de fútbol.

Otro de los lesionados en el torneo Apertura fue Luis Barbosa, de Aurora, quien volvió a sufrir una rotura de ligamento cruzado.


Siento que mi pierna se traba en el pasto”


“Como estaba barriéndome, mi pierna se quedó. Creo que un mejor campo de juego no me hubiera provocado esta lesión. Siempre que jugamos lo sentimos esponjoso”, señaló el jugador de Aurora Caleb Cardozo, luego de la lesión que sufrió en el partido ante Always Ready.

Lo sorprendente de la lesión causó conmoción a más de un jugador por la gravedad del hecho. Con esta situación, cabe recordar que cuatro de las seis lesiones que se dieron en el torneo Apertura se protagonizaron en el estadio Félix Capriles.

La de Luis Barbosa (Aurora), Caleb Cardozo (Aurora), Jorge Flores (Bolívar) y Augusto Andaveris (Always Ready) se dieron en el escenario cochabambino, aunque sólo la de Caleb Cardozo tuvo una directa incidencia del campo de juego del escenario de Cala Cala.

miércoles, 7 de noviembre de 2018

Lesiones musculares más comunes

Toda persona preocupada por su salud entiende la importancia de mantenerse activa a través del deporte y la actividad física. Sin embargo, una actividad exigente o mal ejecutada puede tener consecuencias molestas. Entre ellas están las lesiones musculares, dolencias que varían en gravedad y que son frecuentes después de una rutina de ejercicios.

Contracturas: Es una lesión muscular dolorosa debido a una contracción involuntaria, inconsciente y permanente que no cede de forma natural. Sucede principalmente en la zona de la espalda por concentrarse ahí la mayor cantidad de músculos posturales. Las causas más comunes son: carga excesiva, sedentarismo, posturas mantenidas por largo tiempo, exposición al frío, estiramientos bruscos, mala alimentación y estrés. Lo normal es que el médico recete antiinflamatorios y que la terapia implique estiramientos, masajes y aplicación de calor.

Contusiones: Es una de las lesiones más frecuentes se produce cuando el músculo choca frente a una estructura no cortante provocando hinchazón, rigidez y dolor. Los que practican deportes de contacto como el fútbol son muy proclives a este tipo de lesiones. Es indispensable en el tratamiento pausar el ejercicio, inmovilizar la zona afectada, aplicar frío y vendajes compresivos durante días.

Desgarros: El desgarro se produce por una elongación brusca del músculo. Aquellas secciones del músculo que cruzan con las articulaciones son proclives a este tipo de lesiones, por ejemplo, las caderas o las rodillas. Las personas que practican deportes que requieren una rápida acción y reacción están más expuestas a los desgarros. Por lo general, la fisioterapia basta como tratamiento, aunque en casos más complicados se requiere cirugía.

Calambres: Se trata de contracciones involuntarias del músculo que causan mucho dolor en la zona afectada. El calambre es muy frecuente en las piernas y el afectado tiene la sensación de que el músculo se ha reducido en su tamaño. Con ejercicios de estiramiento y masajes la persona puede hallar alivio al dolor, pero es fundamental mantener reposo.

lunes, 5 de junio de 2017

Lesiones de tobillo


Una de las lesiones más comunes es la de tobillo y para evitarla aconsejan realizar siempre un estiramiento o calentamiento antes de hacer ejercicio o practicar deporte, y sobre todo, no realizar actividades para las cuales no se esté bien entrenado. Otra recomendación es asegurarse de que los zapatos que utilizamos se ajusten a los pies de manera apropiada.

El preparador Físico José Arciénaga nos indica que el calentamiento y estiramiento de los músculos es fundamental a la hora de emprender cualquier actividad física o deportiva. Con una rutina simple pero bien hecha, podemos prevenir esguinces, desgarros y torceduras que nos pueden provocar graves fracturas.
Arciénaga recomienda que todos los estiramientos sean lo más amplios posible sin llegar nunca al dolor. “Es importante resistir en la postura máxima de estiramiento entre 15 y 30 segundos y no rebasar ese punto para no provocar lesiones. Es aconsejable realizar la rutina de manera habitual, antes de iniciar una sesión de ejercicios dentro o fuera del gym”, indica.

jueves, 2 de octubre de 2014

El esguince no perdona edad ni estado físico

Los esguinces de tobillo son lesiones comunes que no distinguen edad, sexo o constitución física. Pueden ocurrirnos durante la práctica de un deporte, al apoyar mal el pie o caminar por superficies irregulares. Muchas veces no sabemos cómo curarlos, pero este estiramiento anormal de los ligamentos solo necesita unos sencillos cuidados.

Consejos ideales. Un esguince de tobillo sucede cuando los giros del pie o la rodilla van más allá de sus límites y ocurre una gran presión sobre el pie. Así, los ligamentos se estiran más de lo normal e incluso pueden desgarrarse, produciendo un esguince.

La hinchazón y el dolor durará entre dos y tres días, en los que le será difícil apoyar el pie, por lo que probablemente tenga que usar muletas. También pueden ser necesarios vendajes, férulas o incluso enyesar el pie.

El verdadero periodo de curación lleva entre cuatro y seis semanas si no es muy grave. Luego de esta fase de descanso, debemos comenzar una lenta recuperación, haciendo poco a poco movimientos y ejercicios para el tobillo, evitando los giros bruscos del pie.

1. Grado 1
Para este esguince se necesita reposo, hielo, compresión y elevación.

2. Grado 2
Aquí es importantísimo mantener el tobillo completamente inmovilizado.

3. Grado 3
Reposo de dos o tres semanas con elementos inmovilizadores como el yeso.

miércoles, 2 de abril de 2014

Autolesiones, más que un problema físico

¿Conoces si tus hijos adolescentes se realizan cortes en sus brazos o piernas? Aunque parezca un hecho aislado, lamentablemente no lo es. Por ello, expertos nos hablan del tema y explican sobre los motivos para lastimarse a sí mismos.

¿Qué es? El psicólogo Guillermo Rivera expresó que “de acuerdo a estudios actuales, el 75% de los trastornos mentales van a comenzar en las personas antes de los 25 años, porque muchas veces las familias no se dan cuenta que el adolescente está manifestando la primera señal de trastorno mental”. El psicólogo Johny Ledezma indicó que no es un trastorno mental sino conductas de otras culturas o rituales que los adolescentes muchas veces bajan de internet, en los que se autoflagelan el cuerpo y los adolescentes suelen copiarlo, muchas veces sin saber el concepto de las lesiones.

¿Por qué lo hacen? Rivera explicó que si se lastiman o cortan es porque están desesperados y sienten un alivio cuando se lastiman, “claro que es un alivio que trae después vergüenza, remordimiento, y además aumentan las posibilidades de que lo vuelva a hacer", remarcó.

¿Cómo prevenir? Rivera señaló que es difícil saber a qué edad le va a ocurrir esto, pero los padres deben enseñar a sus hijos a tolerar la frustración, "algunos padres no aguantan que sus hijos lloren y les soportan todo con tal de no verlos llorar, esto es terrible porque cuando llegan a la adolescencia se van a topar con otros adolescente o con adultos que no les va a importar si ellos lloran y como no han aprendido a controlar la frustración, a aguantar cuando algo no les sale bien, por esto es probable que lleguen a autolesionarse". Ledezma apuntó que mayormente se da en los adolescentes que tienen una estructura neurótica, es decir aquellas personas que cumplen lo que dice la sociedad “porque cuando juegan estos juegos, ellos cumplen todo con todos los pasos del juego o ritual”.

jueves, 2 de enero de 2014

El peligro de un golpe en la cabeza varía según diversos factores

Si bien en el último parte médico se habla de una “leve mejoría” de expiloto de Fórmula 1 Michael Schumacher, expertos advierten que incluso una lesión aparentemente menor en la cabeza puede tener grandes consecuencias.

Cualquier golpe en esa región puede ser peligroso, aunque afortunadamente la mayoría no lo es.

El cerebro es un magma blanco; un órgano delicado y vulnerable. Pese a que está protegido por el cráneo, los movimientos rápidos de la cabeza hacia adelante y atrás, o los zigzagueantes, pueden hacer que el cerebro se estrelle contra su caja ósea.

Incluso las lesiones suaves de este tipo pueden producir alguna clase de lesión.De hecho, las personas que han sufrido accidentes graves parecen lúcidas e ilesas en la primera revisión. Esto se debe a que pueden pasar hasta 48 horas antes de que aparezcan los síntomas.

Cualquiera que haya tenido un golpe en la cabeza debe buscar atención médica inmediata, sin importar lo insignificante que parezca el accidente.

La fuerza del impacto puede causar un giro en el cerebro y dañar nervios y tejidos.

Los afilados cantos del interior del cráneo pueden romper las venas y arterias que corren a través del cerebro, permitiendo una hemorragia. Además, tal y como ocurre en cualquier parte del cuerpo donde se ha producido una lesión, en el cerebro también hay inflamación y contusiones.

Y debido a que en el cerebro no hay espacio para que esa inflamación drene, la presión aumenta y lo aprisiona. Aquí ya estamos hablando de una emergencia médica.

Sin reglas

Luke Griggs, de la fundación Headway, explicó que no existen reglas claras con las lesiones en el cerebro. “Una lesión aparentemente inocua puede ser fatal, como le ocurrió a la actriz británica Natasha Richardson”.

La esposa del también actor Liam Neeson murió de un traumatismo craneal tras un accidente de esquí. Al principio no mostró señales de lesión. “Una de las dificultades que tenemos con las lesiones graves es que los síntomas pueden aparecer tarde. Es por esto que es importante acudir al médico, incluso cuando no hay síntomas”. Todo depende de la situación o el tipo de golpe que se haya sufrido.

Síntomas

Cualquier mareo o pérdida de la consciencia, problemas de equilibrio, vómitos o dolor de cabeza agudo son advertencias que no deben ser ignoradas.

lunes, 9 de diciembre de 2013

Shin Splint, lesión en la tibia

Hay controversia con la denominación de este cuadro y muchas veces se considera sinónimo de varias lesiones. Para una mejor comprensión se debe mencionar que existe una molestia frecuente en deportistas denominada “Dolor Anterior de Pierna” y que incluye varias lesiones tales como el Síndrome Compartimental Crónico de Pierna, la Periostitis, El Síndrome de Stress Tibial Medial y el Shin Splints, estos tres últimos se consideran más frecuentes en las consultas y que tienen un origen similar.

Con estos antecedentes, se puede decir que el Stress Medial Tibial es una lesión progresiva que se inicia con el Shin Splints y ésta progresará a una Reacción Ósea por Stress Tibial y luego a una Fractura por Stress Tibial en caso de no dejar la actividad desencadenante.

Definición

El Shin Splints corresponde a una lesión en la inserción tibial del Sóleo y/o del Flexor Largo de los Ortejos en la tibia, produciéndose una rotura de las fibras de Sharpey de esos músculos (fibras que unen el tendón con el tejido óseo de la tibia).

La ubicación habitual es en la unión del tercio medio con el tercio distal de la pierna, en el borde posterointerno de la tibia

¿Por qué se produce?

Se produce en deportes de impacto como las carreras de velocidad (principalmente en las de fondo), en los saltadores y bailarinas, entre otras disciplinas. Corresponden a un 10 o 15 por ciento de las lesiones deportivas.

Existen numerosos factores que influyen en una lesión por sobreuso como ésta, los que se clasifican en factores intrínsecos y extrínsecos.

Intrínsecos: Son aquellos propios del organismo. En el caso del Shin Splints los desbalances musculares o musculatura inapropiada para resistir entrenamientos exigentes. También se describen factores biomecánicos como pie plano y pronación exagerada. Se han descrito algunos déficits de vitaminas y en casos de deshidratación. Es más frecuente su aparición en mujeres.

Extrínsecos: Estos se deben principalmente a la intensidad de las cargas, el uso de zapatillas poco adecuadas para correr, trotar en superficies duras o el aumento excesivo en las cargas de entrenamientos, entre otras. Por ejemplo, las zapatillas tienen una vida media que va a depender del tiempo y la distancia que se recorra con ellas. En líneas generales duran alrededor de 350 a 600 kilómetros dependiendo de la superficie y del peso del deportista.

Claramente los maratonistas y fondistas son más susceptibles a sufrir esta lesión y siempre los pacientes de mayor riesgo van a ser aquellos que no cumplan con planes de entrenamiento adecuados, que empiecen a correr por su cuenta, aumenten las cargas sin tener una planificación o que no utilicen el equipo adecuado.

Síntomas

Habitualmente se siente un dolor anterior que comienza en el tercio medio de la pierna y puede o no tener irradiación, según la intensidad. No se produce inmediatamente al iniciar una actividad física, sino que algunos minutos después de empezar a correr y va aumentando de intensidad hasta un momento en que simplemente no permite al atleta seguir corriendo. A medida que la lesión va progresando comienza a molestar incluso en actividades de la vida diaria.

Diagnóstico

Al realizar el examen físico se procede a la palpación de la tibia y en su borde posterointerno se percibe una pequeña induración que es dolorosa. Respecto a los exámenes, lo que más se usa es la ecografía, aunque se puede requerir una resonancia cuando se sospecha que existe un compromiso del hueso de la tibia, porque un Shin Splints que no se trata puede derivar en una fractura por estrés. La mayoría de los trabajos científicos utilizan la Resonancia Magnética, ya que la ecografía es un examen operador dependiente y se utiliza muy poco en Estados Unidos.



Tratamiento

Esta lesión se trata con un trabajo regenerativo, con mucha elongación y fortalecimiento a través de fisioterapia. Además se apoya con frío local sobre la zona afectada, antiinflamatorios y, obviamente, resulta muy importante mantener la capacidad física, lo que se logra con trabajo en bicicleta, ejercicios en agua u otras actividades sin impacto. Posteriormente, se pueden utilizar máquinas con menos impacto como la elíptica, hasta que el paciente pueda volver a trotar.

Clínicamente uno puede percibir que al examinar al paciente, mientras exista dolor a la palpación, aún no estará en condiciones de aumentar las cargas.

¿Se requiere cirugía?: No, es una lesión por sobreuso que se maneja con tratamiento médico-kinésico.



Recuperación

Años atrás se detectó que en general la recuperación varía de seis a 12 semanas en caso de que no exista compromiso óseo.

Es importante tener claro que es una lesión que requiere siempre de un trabajo de rehabilitación, es decir, no basta solamente con el reposo, es necesario un trabajo regenerativo. Al hacer reposo un par de semanas cede el dolor y la inflamación, pero al intentar volver a trotar se activa nuevamente la lesión.

Si se realiza un trabajo en el que se mantiene la capacidad física y muscular, el reintegro deportivo no es difícil, porque en el fondo se integra el trote dentro de un trabajo físico que se ha venido haciendo con antelación.



Prevención

Para prevenir estas lesiones es importante que se realice una evaluación médica si es que decide comenzar a realizar una actividad deportiva de mayor exigencia, ya que factores biomecánicos que pueden ser simples en la vida cotidiana, como pie plano o cavo, pueden generar sobrecargas en actividades más exigentes. Se deben confeccionar programas de entrenamiento adecuados a los objetivos y a las condiciones físicas del deportista. Además, hay que usar zapatillas idóneas para la práctica deportiva. Así también se recomienda dosificar las superficies en forma progresiva para adecuarse a ellas. Por último, la elongación es importante como prevención, pese a que no hay evidencias claras en la literatura.

Además, si por algún motivo tiene que parar el entrenamiento por una o dos semanas, se debe ajustar la práctica a un nuevo programa, ya que no se puede retomar el trabajo como si nunca se hubiera parado. Son cosas muy simples que permiten evitar estas lesiones.

lunes, 25 de noviembre de 2013

Descubren nuevo ligamento en la rodilla

Dos cirujanos en Bélgica lograron identificar un ligamento de rodilla humana de cuya existencia, hasta ahora, sólo se tenían sospechas.

En el estudio, publicado en el Journal of Anatomy, los especialistas sugieren que la banda fibrosa podría tener parte de culpa en una de las lesiones más comunes en el deporte.

A pesar de que en el pasado se había hablado de la posibilidad de que existiera el ligamento, los expertos indican que ésta es la primera vez que se establece claramente su función y estructura. Sin embargo, también advierten que es necesario hacer más estudios para probar su importancia en la cirugía de rodilla.

La articulación de la rodilla está rodeada por cuatro ligamentos principales -o gruesas bandas fibrosas- entrecruzados entre los huesos del fémur y la pierna, que ofrecen estabilidad y evitan que se produzca un movimiento excesivo en las extremidades.

Pero la anatomía de la rodilla es muy compleja, y desde hace tiempo varios grupos internacionales han estado explorando las estructuras menos definidas de la articulación.

El cirujano francés Paul Segond fue quien primero ofreció una noción de este particular ligamento en 1879, pero hasta ahora había evitado darle una clasificación quirúrgica definitiva.

Giro o cambio

Ahora, a partir del trabajo de otros cirujanos, el doctor Steven Claes y el profesor Johan Bellemans -de los hospitales universitarios de Lovaina, Bélgica- anunciaron que habían mapeado con exactitud la banda que va desde el lado exterior del hueso del muslo hasta la tibia.

Los investigadores señalan que este ligamento anterolateral (ahora conocido como LAL) podría tener un importante papel protector cuando giramos o cambiamos de dirección.

“Si te fijas, en la historia ha habido un conocimiento oculto de que algo había en ese lado de la rodilla, pero este trabajo finalmente nos ofrece un mejor entendimiento”, comentó el cirujano consultor de rodilla Joel Melton, del hospital Addenbrooke en Cambridge, Reino Unido.

“Pienso que esto es muy emocionante, no hay duda en que han dado con una importante estructura anatómica”.

Los cirujanos belgas usaron técnicas de disección microscópicas para examinar 41 articulaciones de rodillas de donantes y ubicaron este ligamento en todos menos en un espécimen.

También explicaron que la presencia de esta banda podría ayudar a entender mejor una lesión común en el deporte que durante mucho tiempo ha desconcertado a doctores: la rotura del ligamento cruzado anterior (LCA).

Una lesión del LCA es típica en las personas que pivotean durante el ejercicio, es decir, desde atletas y jugadores de baloncesto hasta futbolistas y esquiadores. La rotura puede ocurrir cuando la persona cambia de dirección rápidamente o se detiene de repente, y causa dolor e inflamación, así como reducción del movimiento en la rodilla.

A pesar de los avances en técnicas quirúrgicas, entre el 10 y el 20 por ciento de las personas con un LCA reparado no pueden recuperarse completamente.

Doctor Steven Claes, cirujano de rodilla y uno de los autores del estudio

“Como cirujanos debemos repensar en lo que sabemos sobre lesiones comunes de LCA. Si bien hemos arrojado luz sobre el papel y los efectos de este ligamento, ahora tenemos que determinar con certeza cuándo es mejor intervenir quirúrgicamente”



¿Un hito?

Algunos pacientes señalan que sus rodillas ceden cuando las tuercen o hacen un giro.

Los doctores Claes y Bellemans piensan que una lesión en el ligamento anterolateral puede tener parte de culpa. Su hipótesis consiste en que algunas personas pueden lesionarse el LAL al mismo tiempo que el LCA, lo que deja la rodillas menos estables cuando rotan las piernas.

Sus estudios en biomecánica sugieren que las roturas en este ligamento también podrían ser responsables de pequeñas fracturas que hasta ahora han sido atribuidas a lesiones del LCA.

El cirujano de rodilla Paul Trikha, de la Clínica Ortopédica de Surrey, comentó que cada año hace unas 150 reparaciones de LCA y cuando vio la investigación del doctor Claes se quedó “sin aliento”.

“Enterarnos del LAL nos permite entender mejor las otras estructuras que pueden verse afectadas en una lesión tan común como ésta y posiblemente esto abrirá las puertas a mejorar la cirugía para nuestros pacientes”, dijo.

Pero las reacciones de este trabajo han sido mixtas.

Gordon Bannister, profesor de ortopedia de la Universidad de Bristol dijo que “no hay duda de que se trata de un ensayo muy interesante desde el punto de vista anatómico, pero por el momento no se trata de un hito clínico”.

“Su papel en las lesiones de rodilla es una hipótesis perfectamente razonable, pero el paso más importante será ver si verdaderamente cualquier intervención en este ligamento significará cambios significativos en los pacientes”.

Los autores del estudio ya han empezado a explorar esta posibilidad, y para algunos casos están ofreciendo reparaciones en este ligamento recién identificado.

El siguiente paso para estos especialistas será refinar sus técnicas y monitorear a sus pacientes a fin de verificar si hay mejoras duraderas en su movilidad.

“Como cirujanos debemos repensar lo que sabemos sobre lesiones comunes de LCA. Si bien hemos arrojado luz sobre el papel y los efectos de este ligamento, ahora tenemos que determinar con certeza cuándo es mejor intervenir quirúrgicamente”, explica el doctor Claes.

“Estudios a largo plazo nos darán la respuesta y posiblemente nos permitirán perfeccionar técnicas mínimamente invasivas que permitan una mejor recuperación de nuestros pacientes”.



RELACIONADO CON OTRA LESIÓN

El nuevo ligamento –anterolateral (LAL)– podría estar relacionado con una de las lesiones más comunes de la rodilla, la rotura del ligamento cruzado anterior

La lesión de los ligamentos cruzados está causada por un cambio brusco de dirección de la rodilla, una desaceleración exagerada o una contusión. Puede darse, por ejemplo, cuando se apoya mal la extremidad tras un salto o cuando se frena precipitadamente durante una carrera. La rotura del ligamento cruzado anterior es la más frecuente.

Este tipo de lesión es frecuente en deportistas que realizan deportes como el baloncesto, esquí, fútbol o ciclismo.

Cuando un deportista sufre una rotura de ligamento cruzado, los principales síntomas son: un chasquido, un intenso dolor en la zona, dificultad para apoyar la pierna, inestabilidad en la articulación de la rodilla, cierta inestabilidad en la marcha.

Diagnóstico

Para determinar el diagnóstico el especialista debe realizar varias pruebas.

Cajón Anterior: Es la más común, el paciente flexiona la rodilla a 30 grados, y el médico se arrodilla junto a la parte externa de la pierna afectada y estabiliza el muslo con una mano mientras con la otra realiza una tracción suave sobre la región proximal de la tibia. Si la tibia se desplaza hacia delante es que hay desgarro del LCA.

Estudio radiológico en dos planos: tiene como fin descartar arrancamientos óseos o fracturas de las inserciones de los ligamentos.

Resonancia magnética: es la prueba más indicada para una correcta valoración de la lesión, especialmente si hay hematoma interno.

Tratamiento

Como tratamiento inicial de una rotura de ligamento cruzado, los especialistas recomiendan evitar la hinchazón de la zona afectada con:

Reposo absoluto.

Aplicaciones de hielo los tres primeros días, entre 10 y 15 minutos cada dos horas.

Un vendaje para comprimir la rodilla.

Mantener la pierna elevada por encima del corazón, siempre que sea posible.

Utilizar apoyos al andar, como una muleta o un bastón, durante la primera semana.

La artroscopia, según los especialistas, es la mejor opción para abordar esta lesión, debido a que no es necesario abrir la articulación (se emplean instrumentos endoscópicos) y se produce menos dolor, rigidez e hinchazón. Además, la artroscopia disminuye el riesgo de sufrir complicaciones y el tiempo de hospitalización del deportista.

jueves, 21 de noviembre de 2013

Conoce los primeros auxilios para lesiones de la piel

Lo que tienes que hacer en lesiones de la piel y tejidos subcutáneos. Sigue los pasos en caso de raspón: Lavar con agua limpia y jabón (no detergente). Desinfectar con agua oxigenada. No utilice algodón, sino gasa o, en su defecto, una pieza de tela limpia. Continuar lavando con agua y jabón tres veces al día. Si notara secreción blanquecina-amarillenta, enrojecimiento, fiebre, lleve a la persona a un centro asistencial.

En caso de ampolla: pinchar con aguja estéril para sacar el líquido contenido. No retirar la piel, ya que esto ocasionará no solamente dolor, sino que llevará más tiempo para la cicatrización.

Evitar desarrollar cualquier actividad que implique movimiento sobre el área afectada.

Para herida cortante y penetrante: lavar con agua limpia y jabón. Si hay hemorragia: Colocar apósito estéril, ejercer cierta presión, vendar para fijar el apósito; si no hay, cubrir con tela limpia. Trasladar inmediatamente a un centro asistencial para ser evaluado por personal calificado. No retirar el cuerpo extraño, si aún se encuentra dentro de la víctima, trasládelo así.

Evita lesiones cuando tu hijo practique deportes



Toda actividad física que se practica con exageración, por muchas horas y sin los cuidados necesarios —como el contar con la indumentaria adecuada— tiene sus riesgos, sobre todo cuando los que la hacen son niños en crecimiento. Esto se debe a que sus cartílagos son más frágiles en esa etapa. “La mejor manera de prevenir las lesiones de los niños es tratando de que tengan todos los implementos necesarios para cada disciplina “, explica Raúl Alberto Morales, médico traumatólogo deportólogo.

Por ejemplo, si van a practicar fútbol, deben llevar rodilleras, zapatillas adecuadas —como cachos con tapones para no resbalar—, además de un short y una polera holgada y liviana para no interferir con sus movimientos al correr.

Asegúrate de que el niño tenga un buen entrenador, instructor o profesor de Educación Física. Estos profesionales, al igual que tú, deben tener en cuenta que todo niño posee los denominados cartílagos de crecimiento, que son muy frágiles y es donde se producen las lesiones más frecuentes.

Desde los cinco años hasta los 16 o 17, muchas zonas del cuerpo están en vías de crecimiento y los cartílagos están abiertos. La columna es el último segmento que termina de crecer. Por eso es un error pensar que los niños son aptos para todos los deportes que están a su alcance. “En los colegios, cuando descubren a un niño con aptitudes y bastante energía, le obligan a practicar salto largo, salto alto, resistencia, velocidad, fútbol, básquet y otros sin tomar en cuenta que pueden producirle lesiones debido a que surgen fatigas musculares”, advierte el también traumatólogo ortopedista.

La psicóloga Carolina Espinosa aconseja incentivar el deporte, pero sin exagerar. El otro extremo es que hay padres que por temor a que sus niños terminen lastimados, no les dejan practicar ninguna disciplina. La especialista aconseja ayudarles a desarrollar su motricidad y a perder el miedo a que, por ejemplo, les llegue la pelota. “Lo que se debe hacer es enseñarles la forma correcta de retener el balón si viene en dirección a la cara, si va a practicar básquet; o a caer bien, en caso de la gimnasia, y así en los otros deportes”.

Fuentes: Raúl Alberto Morales, traumatólogo ortopedista-médico de la Clínica del Deporte en el estadio, y Carolina Espinosa, psicóloga.

viernes, 15 de noviembre de 2013

Lesiones de nervios periféricos

Ariel Zabala Bustamante.- El sistema nervioso periférico (SNP) es el apartado del sistema nervioso formado por nervios y neuronas que residen o se extienden fuera del sistema nervioso central (SNC), hacia los miembros y órganos. La función principal del SNP es conectar el sistema nervioso central (SNC) a los miembros y órganos. La diferencia entre este y el SNC está en que el sistema nervioso periférico no está protegido por huesos o por la barrera hemato encefálica, lo que permite la exposición a toxinas y daños mecánicos. El sistema nervioso periférico es, el que coordina, regula e integra cada respuesta de nuestros tejidos internos y externos, por medio de respuestas voluntarias e involuntarias.
Está compuesto por 12 pares de nervios craneales y 31 pares de nervios espinales. En el sistema nervioso periférico (SNP) las células de Schwann ayudan a guiar el crecimiento de los axones y a la regeneración de las lesiones.

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NEUROPATÍA PERIFÉRICA

Los nervios periféricos llevan información hasta y desde el cerebro. También llevan señales hasta y desde la médula espinal al resto del cuerpo.
Cuando estos nervios no funcionan apropiadamente, se instaura algún tipo de neuropatía periférica. Esta neuropatía puede ser un daño a un solo nervio o a un grupo de nervios. También puede afectar a los nervios en todo el cuerpo.
La neuropatía es muy común y hay muchos tipos y causas, algunas neuropatías son hereditarias, otras secundarias a un proceso patológico como la diabetes, trastornos autoinmunitarios como la artritis reumatoidea y lupus, enfermedad renal crónica, VIH, infecciones de hígado, niveles bajos de vitamina B12, alteraciones circulatorias en regiones distales de los miembros, intoxicaciones con metales pesados, consumo excesivo y prolongado de alcohol, exposición a temperaturas bajas por mucho tiempo, procesos virales que afectan a la estructura externa e interna de los nervios, solo por mencionar algunas.
Las más comunes se producen por traumatismos, alteraciones posturales y/o desequilibrios musculares, protrusiones, hernias discales, stress y compresiones que afectan a la estructura misma de una o más raíces nerviosas, dentro las más conocidas tenemos la ciática en miembro inferior, el síndrome de túnel carpiano en la muñeca, las paresias y parálisis faciales, neuritis y neuralgias braquiales (hombro, brazo) y crurales (muslo anterior), etc.
También existen daños severos al nervio cuando este secciona, generalmente después de accidentes traumáticos con fracturas expuestas, heridas punzo cortantes profundas, etc. Donde el tratamiento será quirúrgico.

SÍNTOMAS Y SIGNOS

Los síntomas dependen del nervio afectado. También dependen de si el daño afecta a un nervio, varios o a todo el cuerpo.
Dentro los más comunes tendremos:


DOLOR Y ENTUMECIMIENTO
El hormigueo o ardor en brazos y piernas puede ser un signo inicial de daño neurológico. Estas sensaciones a menudo empiezan con dolor irradiado hacia el trayecto de la raíz nerviosa comprometida y debilidad al realizar algunos movimientos
Usted puede perder la sensibilidad en las piernas y los brazos. Debido a esto, posiblemente no note dolor cuando se para sobre algo puntiagudo e igualmente puede no darse cuenta cuando toque algo que esté demasiado caliente o frío, como el agua en una tina. Asimismo, tal vez no sepa cuando tiene una ampolla pequeña o úlcera en los pies.
PROBLEMAS MUSCULARES
El daño neurológico puede dificultar el control de los músculos y también puede causar debilidad incluso parálisis. Usted puede notar problemas para mover una parte de su cuerpo y puede caerse debido a que se le doblan las piernas.
Realizar tareas como abrocharse una camisa puede ser más difícil. También puede notar que sus músculos tienen espasmos o calambres.


PROBLEMAS CON ÓRGANOS DEL CUERPO
Las personas con daño neurológico pueden tener problemas para digerir alimentos. Usted puede sentirse lleno o con distensión y puede tener acidez gástrica después de comer sólo un poco de alimento. Algunas veces, puede vomitar alimento que no ha sido digerido bien. Puede tener heces sueltas o duras. Algunas personas tienen problemas para deglutir.

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TRATAMIENTO

El tratamiento de la causa del daño neurológico, si se conoce, puede mejorar sus síntomas.
En el caso de los que son secundarios a patologías específicas, se tendrá que controlar la patología de inicio.
Los que son causadas por compresión, identificar el tejido involucrado por medio de test clínicos, estudios de imagen, para dirigir el tratamiento ideal, en algunos casos usted puede necesitar cirugía para eliminar la presión sobre un nervio.


Reponer una vitamina o hacer otros cambios en su alimentación puede servir. Si tiene bajos niveles de vitamina B12 u otras vitaminas el médico puede recomendar suplementos o inyecciones.
La Fisioterapia y Kinesiología bien dirigida será fundamental para llevar una vida funcional estable, tratar y controlar los signos y síntomas del cuadro patológico, aprender ejercicios con el fin de mejorar la fuerza y el control muscular. Las sillas de ruedas, los dispositivos ortopédicos y las férulas pueden mejorar el movimiento o la capacidad de usar un brazo o pierna con el daño neurológico.

TRATAMIENTO

El tratamiento de la causa del daño neurológico, si se conoce, puede mejorar sus síntomas.
En el caso de los que son secundarios a patologías específicas, se tendrá que controlar la patología de inicio.
Los que son causadas por compresión, identificar el tejido involucrado por medio de test clínicos, estudios de imagen, para dirigir el tratamiento ideal, en algunos casos usted puede necesitar cirugía para eliminar la presión sobre un nervio.


Reponer una vitamina o hacer otros cambios en su alimentación puede servir. Si tiene bajos niveles de vitamina B12 u otras vitaminas el médico puede recomendar suplementos o inyecciones.
La Fisioterapia y Kinesiología bien dirigida será fundamental para llevar una vida funcional estable, tratar y controlar los signos y síntomas del cuadro patológico, aprender ejercicios con el fin de mejorar la fuerza y el control muscular. Las sillas de ruedas, los dispositivos ortopédicos y las férulas pueden mejorar el movimiento o la capacidad de usar un brazo o pierna con el daño neurológico.

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PRONOSTICO

El pronóstico depende de la causa de daño neurológico.
Algunos problemas relacionados con los nervios no interfieren con la vida diaria. Otros empeoran rápidamente y pueden llevar a síntomas y problemas graves y prolongados.
El pronóstico es excelente cuando se puede encontrar y tratar una afección, pero, algunas veces, el daño neurológico puede ser permanente, incluso si se trata la causa.
El dolor prolongado (crónico) puede ser un problema mayor para algunos pacientes. No existe cura para la mayoría de las neuropatías hereditarias.
Usted puede prevenir algunas causas de daño neurológico.
Tome alcohol con moderación.
Siga una dieta balanceada.
Controle su estado emocional y evite el stress.
Mantenga un buen control de la diabetes y otros problemas de salud.
Aprenda respecto a los químicos empleados en su lugar de trabajo.


Ariel Zabala Bustamante
Fisioterapeuta-Kinesiologo deportivo
U.M.R.P.S.F.X.CH.
Universidad Central La Paz
Post Grado Universidad SanPablo CEU Madrid-España
Club Real Potosí

lunes, 11 de noviembre de 2013

La crioterapia, una técnica efectiva

Como ya han hecho más que popular los miembros de Invernalia en la famosa serie –y libros– de Juego de Tronos, “winter is coming”, es decir, el invierno está llegando, al menos en el hemisferio norte. Los días son más cortos, los cielos más grises y la temperatura más baja –y mucho– en ciertas zonas.

Pero… ¿y si dijéramos que el frío no es tan malo? No, no es un anuncio de calefacción o de alguna tienda de ropa para la colección otoño-invierno, sino una afirmación que viene del mundo de la medicina deportiva y también del de la belleza. Te hablamos de un nuevo tratamiento de moda entre los deportistas: la crioterapia.

Y es que desde hace unos años el frío se está utilizando para tratar ciertas lesiones y mejorar el estado físico general de una persona. Cuando nos levantamos por las mañanas, una de las primeras cosas que hacemos es lavarnos la cara y, si lo hacemos con agua fría, la sensación de que estamos despertando es mayor. Con esta simple premisa nació la crioterapia, una técnica con resultados sorprendentes para todo aquel que se anima a probarla. Uno de ellos es el futbolista Cristiano Ronaldo, que tanto confía en este tratamiento que ha decidido instalar una máquina de crioterapia en su propia casa. Pero no es el único deportista de élite que la usa de manera habitual, ya que, por ejemplo, todos los equipos de la NBA cuentan con una en sus instalaciones, al igual que la selección de Estados Unidos de atletismo, el potente Bayern de Múnich de Pep Guardiola o varios equipos de ciclismo.

En qué consiste la crioterapia

La crioterapia, que también se conoce como criosauna o aerocrioterapia, es, según Jordi Riba, fisioterapeuta experto en crioterapia, “la aplicación de frío con fines terapéuticos”. Por supuesto que no estamos hablando de salir de casa en invierno sin jersey, se trata de un tratamiento que debe ser aplicado por profesionales que controlen la temperatura corporal y la aplicación de frío a través de vapor de nitrógeno para no perjudicar al organismo, así como su idoneidad dependiendo del estado de salud de la persona que decida someterse a ella.

Quien decida meterse en una de estas curiosas cabinas o criocámaras (en las que se puede llegar a estar por debajo de 130 grados bajo cero) podrá utilizarla tanto con fines deportivos como estéticos; y es que es ideal para tratar las lesiones, mejorar la recuperación tras una dura sesión de ejercicio o adecuar mejor el cuerpo para aprovechar mejor el esfuerzo. Además, mejora el estado de la piel, ayuda a quemar grasas y a eliminar toxinas, entre otras cosas, lo que hace que se presente como un tratamiento muy potente dentro del mundo de la medicina deportiva, pero también para mejorar el estado general de cualquier persona.

En qué se basa la crioterapia

El ser humano es un organismo homeotermo o endodermo, es decir, tiene unos mecanismos que mantienen su temperatura corporal dentro de los límites que son adecuados para él, independientemente de la temperatura ambiental. En este sentido, Jordi Riba indica que la temperatura normal para un adulto oscila entre los 36,5 ºC y los 37,5 ºC, aunque la temperatura orgánica de una persona varía, en condiciones normales, debido a “su sexo, forma de vida sedentaria o activa, ingestión y hora de toma de alimentos o líquidos, momento del día y, en el caso de las mujeres, en la fase del ciclo menstrual en la que se encuentran”.

Para conseguir un equilibrio de temperatura, lo que se conoce como balance calórico o flujo calórico, el organismo efectúa, en condiciones normales, pequeñas reacciones, como puede ser la necesidad de cambiarnos de ropa o, de forma ya fisiológica, a través del sudor o de una tiritona (Temblor producido por el frío del ambiente o al iniciarse la fiebre)

Cuando el ambiente tiene una mayor temperatura que la del interior del organismo, todo el sistema trata de disminuir ese exceso de temperatura generando vapor de agua, produciendo vaso-dilatación de ambos sistemas vasculares (profundo y superficial) y eliminando esa agua a través de la piel en forma de sudor.

Sin embargo, el cuerpo actúa de otra manera cuando el ambiente es más frío que el organismo y, precisamente, en ello se basa la crioterapia. La parte más interna del cuerpo reacciona de una forma mayor, mientras que el sistema periférico sufre una vaso-constricción para evitar que ese calor generado de manera interna se escape por la piel. En ese momento tenemos piel de gallina, lo que técnicamente se conoce como piloerección, pero, si no se consigue regular, se llega a la tiritona, en la que se vasoconstriñen todos los sistemas vasculares.

La crioterapia lo que hace es alterar esos mecanismos termorreguladores del organismo, ya que produce pilo-erección, pero sin llegar a la tiritona. Consigue cerrar el sistema vascular periférico, mientras que el central sufre una apertura sub-máxima que genera una enorme circulación sanguínea que alcanza todos los niveles celulares y mecanismos de nutrición metabólica (hipernutrición metabólica).



BENEFICIOS Y APLICACIONES

La crioterapia consigue una serie de reacciones químicas dentro de nuestro organismo, que favorecen la alimentación celular, así como un aumento y una mejora de la circulación sanguínea. Estos son algunos de sus beneficios:

• Hace trabajar el músculo cardíaco aumentando sus volúmenes, sobre todo, de llenado diastólico, pero no su frecuencia cardíaca.

• Favorece la acción de la insulina mejorando los niveles de azúcar simple en sangre. Además, aumenta la correcta secreción de enzimas pancreáticos, como la insulina, o hepáticos, como las transaminasas.

• Ayuda a la circulación de sustancias gástricas y, por tanto, a su digestión estomacal, así como a la evacuación de las heces a nivel del intestino grueso. También mejora la musculatura intestinal.

• Favorece la absorción de sustancias alimenticias en el intestino delgado, así como la absorción de vitaminas tipo B a nivel intestinal.

• Mejora la circulación y el tránsito de las sustancias del sistema porta, con lo que el organismo consigue eliminar mejor sustancias tóxicas acumuladas en los tejidos blandos como los músculos, los tendones o las articulaciones.

Debido a sus numerosos beneficios, la crioterapia puede tener diversas aplicaciones tanto en el mundo del deporte como en el de la estética:

Crioterapia para deportistas

Por lo tanto, la crioterapia está indicada para muchas personas, aunque quizá una de sus aplicaciones estrella sea en el mundo de la medicina deportiva. Esto es así porque ayuda a tratar lesiones deportivas de diferente índole, ya que está indicado para microrroturas fibrilares, tendinitis, tendinosis, sobrecargas musculares, etcétera.

Además, el hecho de que mejore el músculo cardíaco, la circulación sanguínea o la eliminación de sustancias nocivas hace que el deportista pueda aumentar sus marcas y optimizar su esfuerzo tanto en los entrenamientos como en las competiciones.

En el caso de los deportistas, la crioterapia también es muy útil tras una intensa sesión de ejercicio, puesto que, además de favorecer la recuperación muscular, mitiga, por ejemplo, los golpes o las agujetas.

Crioterapia como tratamiento estético

Como tratamiento estético, la crioterapia tiene, en palabras de Jordi Riba, fisioterapeuta experto en crioterapia, “efectos sobre la piel y el pelo casi inmediatos, al eliminar por este medio la gran mayoría de toxinas del organismo”, por lo que está indicado para tratar alteraciones dérmicas como la psoriasis, la dermatitis atópica, eccemas, piel cetrina, celulitis…

Además, a partir del minuto y medio de aplicación, el paciente deja de quemar azúcar simple y empieza a quemar grasa, por lo que también es efectivo para adelgazar. Sin embargo, es importante no confundir la crioterapia con la criolipolisis, un tratamiento estético no invasivo que ayuda a eliminar grasa mediante la aplicación externa de frío a través de una placa que enfría las células grasas y facilita su descomposición y posterior eliminación.

Contraindicaciones de la crioterapia

No obstante, la crioterapia también tiene contraindicaciones y es que no todo el mundo puede lanzarse a probarla. Jordi Riba, explica a este respecto que “esta técnica es esencialmente un acelerador del metabolismo”, así que todas aquellas personas que sufran patologías en las que el organismo (bien sea por causa congénita o secundaria) no sea capaz de mantener los mecanismos de compensación vasculares no deberán realizar esta técnica sanitaria.

Por lo tanto, quedan descartados para la crioterapia pacientes que han sufrido un infarto de miocardio, cualquier patología vascular grave o severa, que tengan antecedentes de tromboembolismo o que sufran el síndrome de Raynaud (alergia al frío).

Asimismo, las mujeres embarazadas no deben someterse a una crioterapia.



Cómo es una sesión de crioterapia

Si conocemos los beneficios de la crioterapia, puede que nos animemos a probarla. Sin embargo, no todas las personas son aptas para ella y, por lo tanto, el primer paso es una entrevista personal con el paciente en la que se explicarán los antecedentes de enfermedades para valorar si procede aplicarse esta terapia.

El paciente acudirá al centro en ayunas de más de tres horas y el especialista realizará una breve revisión del estado de sus constantes vitales para comprobar que todo está bien en ese momento. Es momento de desnudarse completamente y abrigarse con un albornoz hasta introducirse en la cabina. Una vez dentro, el paciente sólo llevará puesto unos calcetines especiales con tres capas de forro polar.

La sesión dura unos 3-4 minutos y, durante este tiempo, el paciente es sometido a chorros de vapor de nitrógeno que puede llegar a 200 grados bajo cero. Por supuesto, el cuerpo no tiene una sensación de temperatura tan extrema, ya que, si fuera así, sería imposible aguantar una sesión.

El vapor de nitrógeno es aplicado desde los pies en forma ascendente, aunque la cabeza y los hombros siempre permanecen fuera de la máquina para que no se resequen las vías respiratorias. Durante estos minutos, el paciente debe ir moviéndose en forma circular y de manera extremadamente lenta.

Cuando termina la sesión, el paciente vuelve a abrigarse con el albornoz y se toma una infusión para favorecer la diuresis de la gran cantidad de toxinas que se han generado tras este tratamiento. Y es que para favorecer la eliminación de todos estos residuos se debe seguir una correcta disciplina hidratante y nutricional, de la que te asesorarán también en el propio centro, si fuera necesario.

El precio de la sesión de crioterapia ronda los 80-100 euros, aunque existen bonos y clínicas que ofrecen la primera sesión con un importante descuento para que el paciente pruebe experimentar este tratamiento.

lunes, 4 de noviembre de 2013

Calambres musculares en deportistas

Durante un juego, un partido o una práctica exigente, el deportista puede experimentar contracturas musculares o calambres, que pueden ser lo suficientemente serios como para quitarlo de la competencia. La presencia de calambres musculares durante la actividad física es frecuente y generalizada a todos los deportes, pero su mayor incidencia se da en deportes de resistencia como maratones o triatlones.

El calambre consiste en una contracción involuntaria, dolorosa y transitoria de un músculo o un grupo de músculos. Los más propensos a sufrir calambres son los músculos que se ubican en los miembros inferiores, como por ejemplo, los de la pantorrilla, pies y muslos. Con frecuencia, los nadadores sufren de calambres en los músculos gemelos ya que durante la natación los tobillos flexionados mantienen una contracción sostenida de dichos músculos.

¿Qué causa los calambres musculares?

Un alto porcentaje de los calambres que ocurren durante el ejercicio puede ser atribuido a una gran pérdida de líquidos corporales por la sudoración, asociada a una pérdida de minerales como el sodio, que interviene en los impulsos eléctricos que producen los movimientos musculares. Por otra parte, la fatiga muscular tras un esfuerzo muy intenso o un entrenamiento de larga duración, así como la falta de elasticidad, son factores que predisponen a sufrir estos eventos, ya que generan falta de control en los sensores musculares generando una contracción sostenida y dolorosa de la masa muscular. Generalmente, también puede asociarse un precalentamiento insuficiente.

Prevención y tratamiento

Es importante tratar de prevenir los calambres y para ello es necesario mantener una adecuada nutrición, particularmente en lo que respecta a la cantidad de energía a consumir, que dependerá de la intensidad y duración de la actividad física, así como de las características del deportista, como sexo, edad, altura, composición corporal y nivel de entrenamiento.

Otra medida fundamental es la ingesta de líquidos para lograr una correcta rehidratación, que contrarresta la aparición de fatiga. Se debe comenzar el ejercicio físico bien hidratado y asegurar una reposición constante de líquido. Cuando la actividad supera los 60 minutos de duración o en condiciones climáticas muy cálidas y húmedas, conviene ingerir bebidas de rehidratación deportiva para reponer también glúcidos y minerales. En este caso, la reposición de sodio resulta esencial, que es el mineral que más se pierde en la sudoración (además del potasio, calcio y magnesio) y el que más interviene en el trabajo muscular.

Para la mayoría de los deportistas, una dieta balanceada y una adecuada hidratación con una bebida de rehidratación deportiva es suficiente para mantenerse sin calambres. Para quienes son propensos a sufrir severos calambres musculares o quienes son sudadores profusos, eso puede no resultar suficiente. Estos deportistas necesitan incluso más sodio, que pueden obtener sustituyendo el agua por leche o licuados, o adicionando cuarta cucharita de sal en una bebida de 500 cc.

Todo deportista debe procurar un buen acondicionamiento para la actividad física que lleva a cabo, incluyendo ejercicios de flexibilidad. Ante un cuadro de calambre muscular, deberá realizar ejercicios de elasticidad en el músculo afectado, manteniendo la posición de alargamiento hasta que ceda la contractura y llevándolo lentamente a su longitud inicial.

El papel del magnesio

Es un mineral básico para el deportista por su papel en la relajación muscular y el buen funcionamiento del corazón.

Un déficit de magnesio originaría una excitación nerviosa y muscular excesiva (calambre muscular, mialgias...), latidos cardíacos irregulares, reducción de la presión sanguínea, debilidad..., por tanto, hay una relación directa entre la concentración de magnesio y la contracción muscular.

Además, este mineral es necesario para la transferencia y la liberación de energía. El esfuerzo genera una pérdida de magnesio, y la falta del mismo conduce a una reducción de las capacidades de resistencia y de adaptación al esfuerzo. Por todo ello, es fundamental valorar la disponibilidad de magnesio en la dieta del deportista.

Los niveles séricos de distintos minerales, incluido el magnesio, no reflejan el estado actual del mineral en el organismo. Por ejemplo, un deportista puede perder hasta el 20 por ciento de las reservas de magnesio de su organismo sin que se modifique la concentración plasmática de magnesio.



Dieta rica en magnesio

El magnesio forma complejos con la clorofila, el pigmento vegetal que proporciona el color verde a ciertas verduras, por lo que los vegetales verdes (espinacas, acelga, lechuga, ...) son una buena fuente. Este mineral abunda también en las carnes, el marisco, los productos lácteos, los frutos secos y los granos de cereales integrales (no molidos ni refinados).

El agua es otro alimento que puede contener hasta 120 miligramos /litro de este mineral, y constituye una excelente forma de absorción del magnesio.

Las dietas ricas en alimentos refinados suelen tener menor contenido de magnesio que las ricas en vegetales y granos no refinados. El mineral se pierde durante el refinamiento de los cereales, como la harina de trigo y el arroz y el procesamiento de los alimentos, como el azúcar. De manera que una dieta rica en magnesio es aquella que incluye cada día variedad de vegetales, suficiente cantidad de carnes o pescados, así como cereales y derivados integrales (pan, galletas, cereales de desayuno).

Otra de las posibles causas de los calambres, es una dieta pobre en potasio, ya que este elemento tiene relación directa con la contracción y relajación de los músculos. Su deficiencia, conocida como hipocalemia (una cantidad de potasio en la sangre por debajo de lo normal), produce alteraciones del ritmo cardíaco (taquicardias), debilidad corporal (náuseas o mareos) y calambres en las piernas, entre otras patologías. Por eso el deportista debe incluir en su dieta diaria, alimentos ricos en potasio tales como: fríjoles, banano, berros, aguacate, melón, zanahoria, tomate, entre los más conocidos.



Para tomar en cuenta

-Los calambres son frecuentes en la mayoría de los deportes, aunque su prevalencia es mayor en los deportes de resistencia.

-El origen de los calambres en los deportistas no está bien definido, siendo atribuidos a alteraciones del contenido del agua y de minerales como el sodio.

-Su aparición puede ser desencadenada por esfuerzos inusuales en intensidad y duración, que determinan niveles elevados de fatiga.

-Ante un cuadro de calambres, se deberá practicar un alargamiento estático del músculo afectado, llevándolo lentamente a su longitud inicial.

- Se pueden recomendar para su prevención un buen acondicionamiento físico que incluya ejercicios de flexibilidad así como una nutrición adecuada en los aspectos de energía e hidratación.

Riesgo de lesiones en el cerebro

Los jugadores de fútbol que a menudo cabecean la pelota muestran anormalidades cerebrales similares a las de pacientes que han sufrido conmociones, según un estudio que publica la revista Radiology.

Un equipo de investigadores en el Colegio Albert Einstein de Medicina, en la Universidad Yeshiva (Nueva York) usó técnicas de imagen avanzadas y pruebas cognitivas que evaluaron la memoria de los participantes.

“Estudiamos a los jugadores de fútbol porque ése es el deporte más popular del mundo”, dijo Michael Lipton, director del Centro de Investigación de Resonancia Magnética. “Hay personas de todas las edades que juegan al fútbol y hay preocupación porque los cabezazos a la pelota -un componente clave de este deporte- puedan dañar el cerebro”.

En promedio los jugadores de fútbol cabecean la pelota de seis a doce veces en cada partido, y la pelota puede desplazarse a más de 80 kilómetros por hora. Durante las prácticas los jugadores comúnmente cabecean la pelota más de treinta veces.

Es poco probable que el impacto de cada cabezazo cause daño traumático en el cerebro como la laceración de fibras nerviosas, según señalan estos investigadores. Lo que preocupa a los científicos es el resultado de los impactos repetidos.

“Los cabezazos reiterados pueden iniciar una cascada de respuestas que lleve a la degeneración de las células cerebrales”, anotó Lipton.

Para estudiar las consecuencias de los cabezazos los investigadores usaron una técnica avanzada de imagen por resonancia magnética - llamada imagen con tensor de difusión (DTI por su sigla en inglés)- en treinta y siete jugadores de fútbol adultos, con una edad promedio de 31 años, todos los cuales habían jugado fútbol desde la infancia.

Los participantes indicaron que habían jugado al fútbol un promedio de 22 años y habían jugado un promedio de 10 meses en los doce meses hasta el estudio.

La técnica DTI “ve” el movimiento de las moléculas de agua adentro y a lo largo de los axones, las fibras nerviosas que constituyen la materia blanca del cerebro. Estas imágenes permiten que los investigadores midan la uniformidad del movimiento de agua -llamada anisotropía fraccional- en todo el cerebro.

Una anisotropía fraccional baja en la materia blanca indica daños en los axones y se ha asociado con los impedimentos cognitivos en los pacientes con lesión traumática del cerebro.

“Los datos de DTI en relación con los cabeceadores más frecuentes en el estudio mostraron anormalidades de la materia blanca similares a las que hemos visto en los pacientes con conmoción”, apuntó Lipton.

Los jugadores de fútbol que han cabeceado la pelota entre 885 y 1.550 veces por año mostraron una asinotropía fraccional significativamente más baja en tres áreas de la materia blanca en la región temporal occipital.

Por su parte, los jugadores que han cabeceado la pelota más de 1.800 veces en un año fueron más propensos a obtener resultados más bajos en las pruebas de memoria comparados con los participantes que han cabeceado menos veces.

Los investigadores aseguran que seguirán trabajando en este campo, por el universo de cultores de este deporte.

La idea no es crear temor, por el contrario establecer una prevención que no lesione a los deportistas y evitar mayores daños cerebrales.

jueves, 31 de octubre de 2013

Ojo con los dolores de espalda

La mayoría de las personas, a partir de los 25 años, comienzan a sentir los odiados dolores de espalda, pero estos no siempre son por dormir en una mala posición o por cansancio, sino que puede ser que esté sufriendo una hernia discal. El traumatólogo, Jorge Zabalaga, informó de las verdaderas consecuencias y futuros tratamientos o cuidados que debe tener la persona que ya lo padezca.

¿Qué es la hernia discal?. Es una enfermedad que se define como la obstrucción del núcleo pulposo (en el disco intervertebral) y ello produce que los nervios se compriman y se sientan fuertes dolores. "En general se debe a procesos degenerativos del disco", explicó el especialista, además de señalar que el 80% de la gente, después de los 25 años de edad, ha sufrido un dolor de espalda y el 20% de estos se trata de hernias discales.

Causas frecuentes. Las hernias se producen fundamentalmente a la altura de los riñones, siendo raras a la altura del tórax. Es posible que un trabajo físico intenso incremente la posibilidad de sufrir una hernia discal. Por ejemplo, ir al gimnasio y alzar peso en exceso. Por otro lado, también puede aparecer como consecuencia de un traumatismo, debido a una caída o un accidente de tránsito.

Síntomas. Una hernia puede ser asintomática o tal vez causar dolor a consecuencia de la compresión ejercida sobre las raíces nerviosas, la médula espinal y desde la espalda pasando por los glúteos hasta los pies, aseguró Zabalaga.

Recomendaciones. Si la persona siente dichos dolores, lo mejor es que acuda a un médico traumatólogo o neurocirujano para que examine la gravedad y pueda comenzar un tratamiento médico que calmará el dolor con desinflamatorios o realizar una cirugía (aunque es poco frecuente).

Por otra parte, si la persona está sufriendo este tipo de hernias, tiene que guardar reposo en cama durante un máximo de cinco días, tomando los fármacos recetado por un especialista. La posición de reposo más adecuada es permanecer tumbado con las piernas en semiflexión con un cojín bajo las rodillas para relajar así el nervio ciático. Se debe evitar estar sentado.

Consejo. Bajar de peso, porque la persona obesa aplasta su columna, no alzar demasiado peso y en caso que su trabajo lo condiciona a ello, toda persona tiene que usar una faja, tanto n hombres y mujeres.

lunes, 28 de octubre de 2013

MEDICINA DEPORTIVA Estudiar la pisada puede prevenir lesiones

Cada vez hay más personas que se apuntan a la saludable moda del running. Como cualquier ejercicio con carga principalmente aeróbica tiene unos beneficios para la salud importantes (activa el sistema cardiovascular, quema un buen número de calorías, ayuda a mantener a raya el colesterol, la diabetes o la hipertensión arterial), sin embargo, también es un deporte que puede perjudicar a quien lo practica porque es dañino para las articulaciones, tanto de la rodilla como del tobillo.

Así, si queremos evitar posibles lesiones, en primer lugar, hay que aprender a correr (parece mentira que no sepamos cuando ya éramos capaces de hacerlo con alrededor de 20 meses de edad) y, en segundo lugar, debemos averiguar cómo pisamos, con el fin de mejorar dicha pisada y escoger un calzado adecuado.

Gracias a los nuevos avances tecnológicos podemos mejorar nuestra forma de andar y correr y, de esta manera, prevenir trastornos y dolores que puedan aparecer, no sólo con la práctica de deporte, sino también al desempeñar actividades cotidianas al caminar o al permanecer de pie. El estudio de la pisada sirve para determinar cuál es nuestro tipo de pisada, y si es necesario emplear unas plantillas personalizadas para corregir algún defecto en los pies.

¿Qué es el estudio de la pisada?

Son muchos los estudios de pisada que hay en el mercado y, por lo tanto, hay que valorar bien las necesidades de cada uno antes de someterse a uno de ellos; asimismo, en muchos casos, pagarlo.

El estudio de la pisada más sencillo disponible es el que se ofrece en algunas tiendas de ropa. Hay que tener en cuenta que estas pruebas las hacen los mismos vendedores, quienes aconsejarán la compra de un modelo de zapatillas deportivas u otro, según los resultados de dicha prueba. Aunque se supone que habrán recibido formación para llevar a cabo la prueba, no forman parte del personal especializado ni sanitario, por lo que no se trata de un estudio adecuado para aquellas personas que puedan tener problemas médicos asociados, que puedan agravarse al caminar o correr, o para aquellas personas que se quieran dedicar a correr de una manera profesional o semi-profesional.

Mucho más especializado es el estudio biomecánico de la pisada, que consiste en analizar el pie tanto en posición estática (simplemente estando parados de pie) como en movimiento (andando y en carrera), y analizar cómo este movimiento afecta a otras parte del cuerpo (rodilla, cadera y espalda). Por lo tanto, este estudio está encaminado a evitar o reducir ciertos problemas médicos, como pueden ser esguinces, tendinitis, sobrecargas musculares, basculaciones pélvicas, etcétera.

El estudio biomecánico cuenta con diferentes fases que completarán el análisis global de la pisada. En primer lugar, el especialista hace una exploración articular y muscular con el paciente tumbado en la camilla, con el objetivo de ver cómo es el estado físico del paciente de una manera rápida. Después se emplea una plataforma de presiones en la que se realizará un doble trabajo:

-Análisis estático de la postura y de la huella del pie. El paciente permanecerá de pie durante unos segundos encima de una plataforma que está conectada a un ordenador. Dicha plataforma hará un escaneado y lectura del pie y mandará la imagen a una pantalla de ordenador donde podrá ser estudiada por el especialista. Así se conocerá también el reparto del peso del cuerpo en cada uno de los pies cuando se está en esa postura.

- Análisis dinámico de la postura y de la huella del pie. El paciente deberá caminar y, probablemente, correr encima de la plataforma de presiones, como si estuviera utilizando una especie de cinta de correr en el gimnasio. Toda la información será registrada de nuevo por el ordenador.

Una última parte que suelen incluir los estudios biomecánicos (aunque no todos) es el análisis cinemático del movimiento gracias a una serie de marcadores que se colocan en los pies y piernas, y que ofrecen un estudio tridimensional de la pisada.

Con toda esta información, el especialista emitirá un informe en el que valorará si es necesaria alguna corrección para evitar problemas de salud. Estas recomendaciones pueden ir desde la asistencia a rehabilitación, a unas sencillas plantillas que serán elaboradas en talleres de ortopedia basándose en los resultados del estudio biomecánico.

Dónde hacerse un estudio

El hecho de tener problemas de salud, asociados a nuestra forma de pisar, o realizar un deporte de manera regular que implique correr, son dos de las razones principales para que sea recomendable hacerse un estudio biomecánico de la pisada completo.

Hay centros especializados en estos estudios en los que simplemente hay que pedir cita previa, y en ellos se encargarán de realizar todas las pruebas necesarias y de proporcionarnos unas plantillas individualizadas, si fuera necesario. Asimismo, hay algunas consultas privadas de podología que también ofrecen este servicio.

Igualmente, es necesario hacer revisiones que permitan comprobar si la pisada está mejorando y se están reduciendo con ello los problemas de salud. Normalmente, la primera consulta de seguimiento se hace dos meses después, si se ha recomendado el uso de una plantilla; así, se observará si el paciente se ha acostumbrado ya a ella y cómo está pisando con dicha plantilla.

Posteriormente las visitas al especialista serán anuales, si no hay problemas severos.

Los estudios que se hacen en las tiendas de deporte son gratuitos, pero insistimos en que sólo están dirigidos a elegir unas zapatillas concretas, por lo que si se tienen problemas médicos hay que descartar esta opción completamente.



TIPOS DE PISADA

Igual que una huella de barro es la mejor pista para un avezado detective en una película policíaca, la pisada de cada persona es casi como una huella dactilar para un experto. Aunque cada uno de nosotros pisamos de una manera diferente, los especialistas han agrupado los tipos de pisadas en tres grandes grupos: pronador, supinador y neutro.

Pie pronador

La mayoría de los corredores tiene un pie pronador, aunque esto es un efecto fisiológico que hace el propio pie para adaptarse a los diferentes tipos de terreno y así evitar lesiones. En este caso, tanto el tobillo como el pie actúan como los amortiguadores de un coche, dando seguridad a la pisada para que se haga de una forma natural y adaptativa.

La pronación hace que el pie se incline hacia su zona interna en el momento de caminar; el problema empieza cuando dicha inclinación es superior a lo que se estima como normal –lo que se conoce como sobrepronación–, y entonces un especialista debe valorar la necesidad de utilizar una plantilla correctora.

Pie supinador

Por su parte, el pie supinador realiza el efecto contrario al pie pronador, es decir, de manera natural no lleva a cabo, o apenas lo hace, ese giro hacia el interior para salvar obstáculos del terreno, por lo que el pie apoya principalmente por su parte externa.

El hecho de que la parte externa del talón de las zapatillas esté desgastado no es motivo suficiente para pensar que tenemos un pie supinador, puesto que el auténtico pie supinador apoya todo el lateral externo (no sólo el talón), con lo que el desgaste de la suela de la zapatilla debería ser a lo largo. Este matiz hace que el porcentaje de personas que tienen un pie supinador sea muy bajo, y se estima que tan sólo el 10 por ciento de las personas lo tienen.

Pie neutro

En tercer lugar, el pie neutro, también conocido como pie universal o pie normal, es aquel que no suele ejercer movimiento ni hacia dentro ni hacia fuera cuando pisa. Cuando una persona tiene un pie neutro, camina como si tuviera un desplazamiento lineal, ya que tanto el primer impacto al pisar (en el talón), como el segundo de apoyo, se hacen en una especie de línea recta virtual

lunes, 7 de octubre de 2013

Cabezazos y lesiones cerebrales

El fútbol es el más popular de los deportes y uno de los que expresa de mejor manera la habilidad de los deportistas dentro del campo de juego, pero no todo es tan espectacular. El fútbol, como la mayoría de las cosas en la vida, tiene su lado bueno y también el malo.

CABEZAZOS

El golpe a la pelota con la cabeza, el cabezazo, es una de sus características más notables, este movimiento sincronizado en tiempo, distancia y altura, permite a los futbolistas dar continuidad al juego y lograr un determinado propósito circunstancial, en una jugada determinada.

Aunque el cabezazo se lo emplea en diferentes sectores de la cancha, es más notorio y recurrente por parte de los marcadores centrales, para el caso, aquellos que llevan en el dorsal, los números 3 y 5.

Sin embargo, no son pocos los magníficos goles de cabeza para todos los gustos.

DAÑO COLATERAL

Pero los goles de antología con la cabeza o el rechazo de la pelota con energía por parte de los centrales, no son las estrellas de esta nota, sino más bien los efectos colaterales que provoca el choque repetido del balón en la cabeza de los futbolistas.

El médico neurólogo especialista Michael Lipton, del Medical Center Montefiore, el hospital universitario del Albert Einstein College of Medicine, de Chicago, Estados Unidos, efectuó un estudio científico con base en las experiencias de decenas de jugadores de fútbol soccer, quienes presentaban diferentes molestias y dolores en la cabeza.

“Los golpes a la cabeza con los balones de fútbol pueden causar un daño brutal”, explica el científico, con el añadido de que el daño se lo constata a través del tiempo, tras muchos partidos y muchos cabezazos.

Sin embargo, como ocurre en este tipo de investigaciones, otros profesionales no están seguros de afirmar que el cabezazo produce una lesión cerebral.

GRAN VELOCIDAD

Una de las certezas que arroja el estudio de Lipton, es que en un entrenamiento ordinario de un equipo de fútbol, el balón sale disparado a una velocidad promedio de 55 kilómetros por hora.

La velocidad se incrementa de manera considerable en el curso de un partido oficial de competición, porque los planteles contrincantes se juegan puntos, y en las instancias decisivas, el título. Del estudio del médico, participaron 32 futbolistas “cabeceadores frecuentes”. Conclusión: presentaban obvios síntomas de leve lesión cerebral por traumatismo, tal como revelaron las ecografías practicadas.

“Los repetidos cabezazos pueden desatar una cascada de respuestas que conduzcan a una degeneración de las células cerebrales”, dijo Lipton, en la presentación de su estudio ante la Radilogical Society of North América, hace un mes.

La pérdida de capacidad cognitiva, de memoria, y falta de reflejos y reacción ante los impulsos, es un efecto nocivo.

OPINIONES

Luis Montaño

“En todo este tiempo, no atendí un caso así”

“Llevo varios años en el fútbol y no atendí un caso de cualquier jugador que hubiera sido afectado por cabecear el balón”, manifiesta el galeno de Wilstermann, Luis Montaño.

“Sin embargo, es seguro de que en otros deportes de contacto, como en el boxeo, y otros, los rivales salgan afectados, quizá de por vida, por los golpes que recibieron durante su carrera deportiva. De todas maneras, la prevención siempre es buena”, asegura.

Fabián Pacheco

“Posible Alzheimer o mal de Parkinson”

”Evidentemente, cualquier golpe en la cabeza, más aún si es fuerte, puede causar una lesión cerebral.

Puede ser que degenere en la enfermedad de Alzheimer o el mal de Parkinson”, dice el médico deportivo y familiar vinculado a Aurora.

“Si bien el jugador da el golpe a la pelota con la parte frontal de la cabeza, el impacto y la consecuencia, lo recibe la parte posterior. El efecto es acumulativo en el tiempo, sólo con el paso de los años se lo percibe”, agrega.



Jeff astle murió por los cabezazos

Jeff Astle (foto) murió el 19 de enero de 2002, a la edad de 59 años. La autopsia reveló que su deceso se debió a severas lesiones causadas por los cientos de cabezazos que propinó a la pelota durante los más de 20 años que le dedicó al fútbol.

Astle fue ídolo del popular equipo West Bronwich, de Inglaterra, en las décadas de 1960, 1970 y parte de 1980. Su fuerte, su mayor virtud futbolística, residía en los enérgicos y certeros cabezazos frente a la portería rival. En su calidad de delantero, marcó 168 goles durante toda su carrera deportiva, todos para su club, porque en las cuatro oportunidades que fue convocado a la selección de Inglaterra no pudo convertir. En la temporada liguera de 1969-1970 llegó a ser goleador del fútbol inglés, por esta época, West Bromwich, el club de sus amores, salió campeón, debido en buena parte a los goles de cabeza de Astle.

Pero todos los logros futbolísticos no lo salvaron de la muerte, provocada, de manera irónica, por la mayor virtud que tuvo como jugador: los cabezazos, que poco a poco minaron su cerebro, hasta llevarlo al deceso.

Poco antes de su muerte, el exjugador mostró varios problemas cognitivos, falta de coordinación motriz, pérdida de la audición y de la vista, todos dependientes del sistema nervioso central y de las órdenes que imparte el cerebro.

Buena constitución

Astle contaba con un físico privilegiado, medía 1,80 de estatura y complexión robusta, que le permitía atropellar a sus rivales y ganar la mayoría de las pelotas que llegaban al área por arriba, tanto en función de ataque y cuando le tocaba defender.

Tras su muerte, el escáner cerebral mostraba una lesión en la parte frontal del cerebro.

“Es poco probable que hubiera desarrollado un trauma semejante tan joven si no hubiera golpeado el balón repetidamente con la cabeza. Quizá incluso nunca lo hubiera desarrollado”, comentó el doctor forense británico Derek Robson, quien lo trató durante esos años.

Astle no fue el único que manifestó estos síntomas: Bill McPhail, jugador del Celtic, de Escocia, mostraba síntomas de demencia senil a una edad muy temprana, era un recio defensor que dominaba el juego aéreo... a cabezazos.



El límite: 1.000 cabezazos por temporada

Los jugadores que formaron parte del estudio efectuado por el médico Michael Lipton, y que mostraban algún síntoma de un problema cerebral, como dolor de cabeza o mareos, certificaron, de acuerdo a sus cálculos, que dieron alrededor de 1.000 cabezazos en una temporada oficial, con leves diferencias, tomando en cuenta la posición en la que juegan habitualmente en sus equipos.

A partir de esta conclusión, se toma como un parámetro válido la cifra de 1.000 cabezazos, para significar que es la franja de seguridad a la que deben ceñirse los futbolistas y otros deportistas que practican disciplinas de contacto o juego fuerte, que involucra, invariablemente, el uso de la cabeza para golpear.

Se realizaron experimentos científicos, simulando los golpes a la cabeza con el balón. Los voluntarios que más repeticiones realizaron durante la prueba tenían peores resultados en los test posteriores, destinados a medir habilidades cognitivas como la memoria verbal o los tiempos de reacción.

Pero hay objeciones. El Dr Andrew Rutherford, de la Universidad de Keele, EEUU, lleva tiempo realizando una investigación parecida y no lo tiene tan claro. Él afirma que los traumas en la cabeza se deben a los cabezazos que se propinan los jugadores entre ellos cuando están en el aire de manera involuntaria… o voluntaria, que de todo hay.

lunes, 30 de septiembre de 2013

Las lesiones son una constante en el fútbol y por ello nuevas técnicas y métodos se emplean en los quirófanos

En el deporte, en general, y más aún en el de alta competición los atletas tienen un enemigo en común que se llama lesión. Existen de todo tipo, según sea la disciplina que se practica. Las más comunes son las de tobillo, hombro, codo y muy particularmente de rodilla, considerada la más temible de las lesiones, cuya recuperación va de seis a ocho meses.
Las lesiones van desde una contusión (sin daño específico), esguince (un fuerte estirón) y desgarro (rotura de un tendón o músculo). Los desgarros se clasifican en tres grados: de primer grado, es un esguince o estirón; de segundo grado, es un desgarro o rompimiento parcial del ligamento; y de tercer grado, es un desgarro total del ligamento.
Las causas de una lesión obedecen a varios factores, por lo general son extrínsecos (externos) y factores intrínsecos (internos). Entre los primeros están el equipamiento o indumentaria deportiva, el calzado, la superficie de juego y las condiciones climáticas; entre los segundos la edad, inexperiencia, fatiga muscular y otros.
Los síntomas de una lesión son dolor, inflamación e inestabilidad. Algunas lesiones, cuando no son de gravedad, pueden ser tratadas con analgésicos y desinflamantes. En el otro extremo, es necesaria una operación.
Hoy en día, gracias a la tecnología, es fácil diagnosticar con precisión una lesión y su correspondiente tratamiento. Se efectúan estudios o exámenes de imagen como radiografía, tomografía o resonancia magnética.
Cuando una lesión, necesariamente, debe ser tratada de manera quirúrgica, surgen tres opciones: la operación, que es el corte y la manipulación de las estructuras anatómicas; la artroscopia, son dos pequeñas incisiones en la rodilla, por una se introduce un cámara y por la otra el instrumental médico; y la tercera opción es el injerto, con partes del mismo paciente o con piezas compradas en los bancos de ligamento.

La voz del galeno
Carlos Pérez, que fue médico de la selección nacional, en la época de Erwin Sánchez, afirmó que “es imposible determinar el grado de una lesión a simple vista, para eso existen estudios de imagen para saber exactamente qué lesión es, si está en el hueso o en los tejidos blandos; por medio de esos exámenes, procedemos”.
Nelson Ayupe, médico de Oriente, dijo que como ser humano se siente tocado en su interior ante cualquier lesión: “Los médicos nos impactamos cuando los estudios revelan la magnitud de la lesión. Por ejemplo, me da mucha pena por Pedro (Azogue) porque inicia su carrera y es titular en la selección. Pero no todo es malo, su edad (18 años) ayudará mucho para su recuperación”. También se lastimaron esta parte del cuerpo Juan Maraude y Rudy Cardozo.
Javier Severiche fue médico de Blooming y es uno de los especialistas en rodilla. Su experiencia le dice que: “el avance de la ciencia garantiza en un 80% la rehabilitación plena y total del daño. Hay técnicas nuevas que se han puesto de moda y han dado buenos resultados”.
Esos métodos en confrontación son la cirugía transtibial y el método del portal medial. La primera es considerada pasada de moda y la segunda muy actual. La diferencia radica en la manera de conectar el túnel tibial hacia el centro de la huella tibial. La precisión permite una mejor y mayor recuperación.
Hace poco Jorge Ruth, guardameta de Blooming, volvió a lesionarse del hombro; Luis Méndez, reciente contratación de Oriente, se rompió el tendón de Aquiles, igual que David Beckham (15 de marzo de 2010), entonces jugador del Milan, por lo que se perdió el Mundial de Sudáfrica 2010. Los médicos aseguran que una preparación física adecuada puede prevenir una buena parte de las lesiones

En cifras

2006
EL AÑO DE LAS LESIONES
En España 19 de los 20 equipos tenían lesionados de rodilla

2.500
DÓLARES AMERICANOS
Es el costo de un injerto que se compra en Estados Unidos

2013
LESIONADOS DE RODILLA EN EL APERTURA
Juan Maraude, Pablo Azogue y Rudy Cardozo fueron operados

3.000
DÓLARES AMERICANOS
Es el precio de una cirugía de rodilla en el mercado boliviano

Ronaldo se lastimó en vivo y directo, con el Inter, en 2000
Una de las escenas más dramáticas que registra la historia del fútbol y de la televisión es la lesión de Ronaldo. El brasileño, literalmente se rompió en vivo y directo, mientras el partido era transmitido por televisión.
Un 12 de abril del 2000, Ronaldo Luiz Nazario de Lima volvía al fútbol luego de superar seis meses de lesión, tras una rotura parcial del tendón de su rodilla derecha sucedida el 21 de noviembre de 1999.
En el Calcio, hubo gran expectativa por su retorno. Su equipo, el Inter de Milan, visitaba a Lazio que para entonces estaba al frente en el marcador por 2-1.
Con el ingreso del brasileño, el técnico Cesare Maldini pretendía potenciar el ataque que tenía en cancha al chileno Iván Zamorano.
A seis minutos de ingresar al terreno de juego generó una jugada y se proyectó. Antes de pisar la media luna, sin marcaje de un rival, se cayó y tuvo que ser sutituido.
La lesión, que lo alejó de las canchas por medio año, terminó de romperle la rodilla y todos pensaron que era el final de su carrera.
Ronaldo demostró ser un luchador y así fue. Se recuperó y volvió para ganar la Copa del Mundo 2002, con Brasil, luego fichó por el Real Madrid y pasar la mejor época de su carrera. En 2009, jugando para el Milan, se rompió la otra rodilla.

Duros golpes para jugadores nacionales
Juan Maraude (Guabirá) Rudy Cardozo (Bolívar) y Pedro Azogue (Oriente Petrolero), a pesar de jugar en diferentes clubes de la Liga boliviana, tienen algo en común: la temible lesión de rodilla en el actual torneo Apertura.
Azogue se lesionó en el partido que los refineros vencieron (3-1) a Universitario en el estadio Tahuichi, por la tercera fecha del torneo Apertura.
Ese mismo día, miércoles 18 de septiembre, en Cochabamba y por el mismo marcador, Bolívar perdió ante Wilstermann y de paso a Cardozo.
Al día siguiente, jueves 19 de septiembre, Guabirá perdió (1-2) contra Real Potosí, en La Caldera de Montero. En la previa al cotejo, el argentino Juan Maraude se rompió la rodilla y tuvo que ser operado, casi de inmedito.
Hace poco, Jorge Ayala, de Aurora; Joselito Vaca y Miguel Loaiza, de Blooming, también fueron víctimas de sus rodillas, pero no fueron operados.

Famosas lesiones en figuras mundiales

La lesión de rodilla visitó al tenista español Rafael Nadal. Por esta causa estuvo inactivo durante siete meses y casi se aleja de la práctica del tenis.

El argentino Jorge Burruchaga, autor del 3-1 en la final de México 86 (contra Alemania), dejó tempranamente el fútbol por una lesión de rodilla

No solo los deportistas se lesionan. María Dolores Flores Ruiz, más conocida como la cantante Lola Flores, también se operó la rodilla.

Carles Puyol, capitán y figura del FC Barcelona de España, fue operado de la rodilla el 15 de marzo pasado de su 36º cirugía.

Hugo Sánchez, el histórico delantero mexicano y del Real Madrid, también fue víctima de la rodilla. Solo jugó 12 partidos en la temporada 90-91.

José María Aznar, expresidente español, entrando al año 2000 tuvo que ser internado y operado de una lesión en la rodilla izquierda.

VAN BASTEN Y BATISTUTA FUERON VÍCTIMAS
El holandés Marco van Basten fue uno de los delanteros más temidos del mundo, que junto a sus compatriotas Ruud Gullit y Frank Rijkaard formó el trío de oro del AC Milan. Ganador de tres Balón de Oro, desde 1992, a lo largo de su carrera sufrió graves lesiones de rodilla que marcaron su vida. El 26 de mayo de 1993 se rompió la rodilla en la final de la Copa de Europa cuando el Milan enfrentaba al Olympique de Marsella.
Van Basten solo pudo jugar 20 minutos y sufrió una grave lesión de rodilla que le obligó a someterse a cuatro intervenciones quirúrgicas y a realizar intensas jornadas de rehabilitación. Tras un año sin jugar, dejó el fútbol en 1995.
Gabriel Omar Batistuta es otro testimonio vivo de lo que las lesiones pueden hacer en un deportista. Por los problemas de rodilla, hubo un tiempo en el que no podía estar en pie más de media hora. Se conoce que ese es el resultado de las infiltraciones que le han destrozado los tendones.
El máximo goleador de la selección Argentina (56 goles) recuerda que el trajín del Calcio, cuando jugó en la Fiorentina (9 temporadas, 217 goles), era tan duro que una temporada llegó a disputar 65 de los 70 partidos de su equipo, en la mayor de las veces infiltrado de la rodilla.

De Bolivia

MARCO ANTONIO ETCHEVERRY
Volante (Colo Colo): En 1993 se rompió los ligamentos. Mariano Buyol, de la ‘U’ de Chile cayó sobre su rodilla izquierda.

ERWIN ‘CHICHI’ ROMERO (el Maestro)
Volante: El 10 de todos los tiempos se rompió el tendón de Aquiles (1990, The Strongest). Se recuperó, retornó un año después y se retiró en 1995.

GUILLERMO ÁLVARO PEÑA
Delantero: El cruceño debe ser el futbolista boliviano con mayor número de operaciones en la rodilla, siete en total. Un tiempo le impidió caminar.

CARLOS ARAGONÉS ESPINOZA
Volante: Fue un futbolista de juego elegante. Su repatriación a Destroyers significó el final de su carrera (1985) por rebeldes lesiones en la rodilla.

ALEJANDRO SCHIAPARELLI
Defensa: El central argentino dejó el fútbol hace dos años por una lesión en la rodilla, cuando jugaba en Oriente.

lunes, 23 de septiembre de 2013

Flato: qué es y cómo combatirlo

Con el buen tiempo muchos se animan a hacer deporte. Correr es uno de los más populares por su sencillez. El equipo para trotar por las calles se reduce a ropa cómoda y unas zapatillas especiales. Los novatos inician la marcha con mucho ímpetu y grandes ánimos, pero a los 10 minutos un dolor aparece en un costado del abdomen que les obliga a parar. Es el fastidioso flato.

El flato es dolor de diafragma, el músculo que separa la cavidad torácica de la abdominal. Aparece con facilidad en deportistas desentrenados o que han hecho un sobreesfuerzo o personas que no hacen ejercicio de manera habitual. La natación es el deporte que más flato produce, el ciclismo el que menos, los ejercicios aeróbicos, como correr, están en un punto intermedio.

Causas del flato

Las causas no están claras, pero los expertos coinciden en que se desata por una mezcla de varios motivos.

El principal tiene que ver con la falta de riego sanguíneo bien oxigenado a este músculo. “Con la actividad física, los músculos del resto del cuerpo demandan sangre y el flujo se deriva hacia ellos. El diafragma, desatendido, se fatiga y sufre pinchazos”, explica Pedro Pérez, del Departamento de Educación Física y Deportiva de la Universidad de Valencia.

A esto hay que sumar tirones en los ligamentos que unen el estómago, el diafragma y las paredes viscerales que se producen por los saltos y movimientos propios del ejercicio.

También contribuyen al dolor el exceso de gases en el intestino por haber comido demasiado antes de hacer ejercicio y no haber dejado pasar las dos o tres horas de la digestión.

Un dolor tipo cuchillada

“Cuando el deportista come demasiados hidratos de carbono, fibras y toma líquidos con gas se distiende el intestino y se produce el dolor”, explica Alberto Oro, de la Facultad de Ciencias del Deporte y la Educación Física de la Universidad de A Coruña. “Lo ideal es comer sopas vegetales, pescado, carne con poca grasa o huevos y comer en pequeñas cantidades”, puntualiza.

Si nos da flato hay que disminuir el ritmo de la actividad o incluso parar. “Es un timbre de alarma del organismo”, subraya el doctor José González, especialista en Medicina Deportiva del Centro Médico Deyre. Si no escuchamos esta alerta y proseguimos con el ejercicio aumenta hasta convertirse en un dolor tipo cuchillada que impide la respiración y produce náuseas. Una vez parados alivia el dolor apretarse en el costado dolorido, agacharse y controlar la respiración.

Estudio en deportistas

En un estudio con 965 deportistas, se comprobó que el dolor tipo flato, disminuía con la edad. Asimismo, se comprobó que el sexo, el índice de masa corporal y el tipo de entrenamiento no afectaban a la severidad de la prevalencia, pero los encuestados que entrenaban con regularidad, presentaban menos problemas de este tipo. Se comprobó que se daba con mayor frecuencia en corredores frente a ciclistas.

En otro estudio con 965 deportistas, comprobaron que el flato es más prevalente en las actividades que producen movimientos repetitivos del torso, y en aquellas actividades en las que el torso requería una postura en extensión (correr, nadar, montar a caballo) el dolor aparecía a ambos costados del abdomen, descrito como una rampa, calambre, dolor, punzada, etc. Estudiaron las causas de este dolor, encontrando entre ellas una falta de oxígeno en el diafragma (isquemia), estrés en los “ligamentos” viscerales, enfocando la etiología (origen) del mismo hacia un calambre de la musculatura y una irritación de la zona del peritoneo.

También se ha valorado este tipo de dolor con EMG (electromiograma), pero no se concluyó que hubiera un cambio en la actividad muscular durante el flato, por lo que no pudieron evidenciar que este dolor sea sugestivo de un calambre muscular.



Cómo aliviar el dolor

Juan Bosch, médico especialista en Medicina del Deporte, asegura que el hecho de sufrir flato no parece que tenga repercusión alguna sobre la salud, si el afectado sigue con la actividad física, aunque añade que “tanto las características como la intensidad del dolor suelen obligar a parar el ejercicio”.

Una vez surge, la ejecución de diferentes maniobras, “como realizar una respiración abdominal, hacer estiramientos del lado doloroso o expulsar el aire con los labios fruncidos puede disminuirlo”, indica.

Otro estudio de los expertos australianos DP. Morton y R. Callister, publicado en “International Journal of Sport Nutrition and Exercice Metabolism”, en 2004, sobre el efecto de la composición de las bebidas ingeridas relacionado con el dolor abdominal transitorio también tiene sus conclusiones: con el objetivo de evitar el flato, los individuos susceptibles deberían abstenerse de consumir zumos de frutas y bebidas reconstituidas con gran contenido en carbohidratos y alta osmolaridad (bebidas hipertónicas), poco antes y durante el entrenamiento.

Esta afirmación la corrobora Bosch quien agrega que, a la vez, “la práctica habitual de ejercicio físico disminuye la percepción del dolor cuando este surge”.

Una revisión de C. Ayán, de la Facultad de Ciencias de la Educación y el Deporte, de la Universidad de Vigo (Pontevedra), publicada en la Revista Andaluza de Medicina del Deporte, resume en cuatro puntos las recomendaciones para quienes son más susceptibles de sufrir flato:

1. Modificar la pauta respiratoria una vez aparece: las inspiraciones profundas o la respiración abdominal pueden disminuir su intensidad.

2. Movilizar el abdomen: hacer estiramientos de la zona afectada, aplicar presión con la mano o aumentar la tensión de la musculatura del área afectada mediante contracciones musculares voluntarias.

3. Controlar la ingesta de sólidos y líquidos antes y durante el ejercicio, para poder identificar de forma más fácil los que con mayor frecuencia desencadenan un episodio.

4. Fisioterapia en los afectados que se haya demostrado una correlación entre este dolor abdominal y una alteración postural.