“La diabetes se presentaba a los 45 años, pero bajó a los 35 y en las últimas décadas, la de tipo II, se detectó en personas de 20 a 15 y con frecuencia, es la más común en el mundo debido al sobrepeso por ingesta de productos calóricos, azúcar refinada y grasas. Lo preocupante es que niños de 10 años ya tenían obesidad reveló un estudio realizado hace algunos años en Bolivia”, explicó el endocrinólogo Javier Córdova.
Según el especialista, con la llegada de la menopausia la mujer era más propensa a tenerla, salvo en el departamento de Cochabamba que era frecuente en varones de edad adulta y en personas por encima de los 60 años. Lo que ahora alarma es la cantidad de niños y jóvenes que ya la padecen en el país.
“El consumo excesivo de azúcar, grasa y el sedentarismo, debido a la falta de ejercicio son parte de la vida urbana. Las personas jóvenes que vienen del área rural son susceptibles de tener obesidad, hipertensión y de ser diabéticas, porque estaban acostumbradas a realizar un desgaste físico que en la ciudad no les es posible”, aseguró Córdova.
TIPOS
Existen tres tipos de diabetes, pero dos son los más frecuentes entre ellos están: la diabetes de tipo I y II y la diabetes gestacional, que no es muy frecuente, pero que presenta ciertos riesgos para la madre y el bebé.
Tipo I.- En esta enfermedad el cuerpo no produce o genera poca insulina, debido a que las células del páncreas encargada de la producción de insulina dejan de trabajar y se necesita de inyecciones diarias para suplirla. Sucede a cualquier edad, pero se diagnostica con mayor frecuencia en niños, adolescentes y adultos jóvenes.
Tipo II.- Antes era frecuente en la edad adulta, pero en la actualidad el número ha aumentado en forma alarmante en niños y jóvenes, por las altas tasas de obesidad.
Diabetes gestacional.- Se presenta en mujeres durante el embarazo y en otros con cierta predisposición por la parte familiar. Por lo general desaparece una vez que se produce el parto, en otros casos se queda con cierto riesgo de desarrollar esta enfermedad.
DIAGNÓSTICO
Para realizar un diagnóstico sirven como rangos de medición de la glucemia en ayunas, que debe estar entre 70 a 100 y después de las comidas entre 80 a 140 si es normal. En el caso que esté por encima de 126 y 140, la persona ya tiene diabetes pese a que no exista síntoma alguno.
“Los signos clásicos son: mayor sed y hambre, micción (eliminar orina) diurna y nocturna frecuentes, calambres, pérdida de peso, visión borrosa y cansancio. En casos avanzados, debilidad y presión alta, que pueden ser prevenidos con un diagnóstico temprano. La diabetes de tipo II es asintomática, por esta razón se debe hacer un control en las personas con predisposición a tenerla”, aseguró el endocrinólogo.
Aquellas personas, cuyos familiares tuvieron diabetes deben solicitar a su médico un examen de glucemia a cualquier edad, para medir los niveles de azúcar en su sangre y, más aún, si tienen sobrepeso y presión alta, porque una vez detectada la enfermedad se la controla, pero no existe una cura.
“Si a la persona se le detecta diabetes a los 30 años, en diez años más si no controla su enfermedad habrá perdido la visión, tendrá serios problemas renales y neuropatías. Existe un detalle muy importante, si el nivel de glucosa en ayunas está por encima de 126 ya existe un diagnóstico de prediabetes que deberá ser controlada con una dieta estricta y medicamentos adecuados”, explicó Córdova.
Los exámenes en sangre son los más utilizados para el diagnóstico de esta enfermedad:
1.- Glucemia en ayunas.- Útil para medir si los niveles de glucosa son normales (70 a 100). Si estos niveles están entre 100 a 126 se denomina alteración de la glucosa o prediabetes en el caso de diabetes de tipo II.
2.- Glucemia sin ayunas.- Se realiza la prueba luego de que la persona haya desayunado o ingerido alguna bebida azucarada, la medida normal está entre 80 a 140, si está por encima de los 180 la persona ya tiene diabetes por lo general se utiliza en el caso de la diabetes de tipo II.
3.- Hemoglobina glucosilada (A1C).- El rango normal debe estar comprendido entre 4 a 6,5, si sobre pasa a esta cantidad ya tiene diabetes. También es muy práctica para que el especialista pueda conocer cómo la persona está controlando su enfermedad.
4.- Pruebas de diabetes tipo II.- En algunos casos, la enfermedad es asintomática, pero se recomienda hacer pruebas de diagnósticos en niños de 10 años que sean obesos y repetir el proceso cada 3 años. En adultos con sobrepeso por encima de 27% de índice de Masa Corporal y en personas por encima de los 45 años
TRATAMIENTO
En la diabetes de tipo II el cambio de estilo de vida juega un papel muy importante, el dejar de lado las costumbres de comer mucho carbohidrato en lugar de cereales y dejar de consumir azúcar que no es algo grave, sino más bien beneficioso para el control de esta enfermedad.
El realizar ejercicios y dejar de lado el sedentarismo, producto de la nueva tecnología en los niños y adolescentes que en la actualidad pasan la mayor parte de su tiempo frente a un computador que en las canchas jugando futbol u otro deporte.
En el caso de la diabetes de tipo 1 la insulina es parte de su vida diaria, sumada a una dieta saludable, el realizar ejercicios contribuirá a controlar su enfermedad que será más llevadera en estas condiciones.
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