Reconstrucción mamaria tras la mastectomía

La reconstrucción mamaria es una intervención quirúrgica que permite restaurar un seno dañado por una ablación parcial o total luego de un cáncer de mama. Entre las motivaciones que conllevan a tomar la decisión de efectuarse esta operación, encontramos el deseo de subsanar la pérdida del seno, la cual es vivida como una mutilación. Asimismo, muchas mujeres quieren sentirse más deseadas y cómodas con su cuerpo, olvidar los recuerdos difíciles del cáncer y poder tener mayor elección en la vestimenta que anhelan utilizar. De manera general, la reconstrucción mamaria puede efectuarse al mismo tiempo que la ablación del seno (mastectomía). En este caso, se trata de una reconstrucción inmediata. Sin embargo, cuando la paciente debe realizarse una quimioterapia y/o radioterapia luego de la mastectomía, la intervención quirúrgica de reconstrucción se pospone y el médico propone hacerla luego del tratamiento (reconstrucción diferida). Es importante destacar que una reconstrucción mamaria necesita generalmente 2 a 3 intervenciones quirúrgicas, las cuales deben ser espaciadas por 3 meses. La primera operación tiene el objetivo de reconstruir el volumen del seno. La segunda consiste en armonizar las dos mamas para optimizar el resultado estético. En cuanto a la tercera, permite reconstruir la zona de la areola y del pezón. Según varias investigaciones científicas, la reconstrucción mamaria mejora el bienestar psíquico de las pacientes. Tanto la intervención inmediata como diferida tienen efectos benéficos. Por esta razón, se recomienda efectuarse esta operación aunque requiere tiempo para tener un resultado óptimo. Toma en cuenta que la reconstrucción mamaria es una intervención quirúrgica que comporta riesgos, particularmente por la anestesia. Sin embargo, éstos se reducen si eliges un cirujano y anestesiólogo calificados y competentes.

¿Qué?

Información postoperatoria limita las posibles molestias

Luego de la reconstrucción mamaria, puedes sufrir de dolores, los cuales se reducen con la toma de analgésicos prescritos por tu médico. Asimismo, es necesario descansar y no cargar pesos importantes durante 15 días. Además, no puedes efectuar movimientos repetitivos y amplios. Generalmente, es necesario utilizar un corpiño especial para sostener adecuadamente los senos.

Obtén una decoloración de cabello exitosa

NO DETERIORES TU CABELLERA

Es posible decolorar tu pelo en casa sin tener que acudir a una peluquería. Es una opción más económica. Sin embargo, debes evitar que tu cabello quede de color naranja, rizado y dañado. Toma en cuenta que los productos de decoloración tienen el objetivo de aclarar el pelo, oxidando los pigmentos de melanina contenidos en la fibra capilar. Por eso, es un procedimiento agresivo para la cabellera. La mejor manera para limitar los desastres capilares consiste en proteger tu cabello antes, durante y luego de la decoloración. Te proveemos tips útiles para lucir un pelo rubio resplandeciente.

1. PREPARACIÓN

Es fundamental preparar tu cabello para la decoloración, realizando una serie de tratamientos de acondicionamiento una vez por semana como mínimo. Debes empezar un mes antes de decolorarte el pelo. Esto permite proteger tu cabello de las agresiones que le vas a ocasionar. Generalmente, se aconseja optar por los productos a base de plátano, palta, yogur o coco, ya que aportan una hidratación profunda.

2. PRODUCTO

Debes elegir un producto de decoloración que sea adecuado a tu tono natural. En la mayoría de los casos, puedes encontrar en la parte posterior de la caja informaciones acerca de los colores de pelo. Si tienes alguna duda, debes pedir consejos a un profesional para no efectuarte una decoloración excesiva que te brindará un tono anaranjado. Asimismo, intenta comprar la opción menos agresiva para tu cabello.

3. PRUEBA

Muchas personas piensan que es una pérdida de tiempo, pero es necesario que te realices una prueba con el producto para observar si tienes una reacción alérgica. Aplícate una gota de la solución decolorante sobre tu muñeca 24 horas antes de decolorarte el cabello. Si presentas una erupción cutánea, picazón o sensación de quemadura en esta zona, debes optar por otra alternativa o acudir a una peluquería.

4. APLICACIÓN

En el momento de aplicar tu decoloración, debes colocarla sobre pequeñas secciones de pelo, empezando por las raíces y luego, bajando hacia las puntas. Después, cúbrete la cabeza con un gorro de plástico y espera el tiempo de penetración que requiere el artículo decolorante. Finalmente, aclara tu cabellera para quitar el producto hasta que el agua quede totalmente transparente.