Mientras Estados Unidos y sus aliados juzgaban en Nuremberg a médicos que realizaron experimentos criminales con judíos y gitanos en Auschwitz, casi al mismo tiempo, en 1946, enviaba galenos a Guatemala a realizar similares tareas de experiencias científicas criminales con ciudadanos guatemaltecos.
La gravedad de tan aberrantes experimentos es mayor, según el informe de una comisión presidencial de EEUU conocido el lunes y revelado por la BBC.
Técnicamente la idea era probar la efectividad de la penicilina en condiciones extremas. Pero la realidad demostró que se infectó a 1.500 personas con sífilis y gonorrea sin su consentimiento -aunque la cifra podría subir a 2.500- para estudiar los efectos de la penicilina en estas enfermedades de transmisión sexual, reporta el reciente informe revelado por la BBC.
Disculpas de Washington
El presidente Barack Obama reconoció que entre 1946 y 1948 un equipo médico realizó un experimentoen el cual se infectó con bacterias de sífilis y gonorrea a prisioneros, soldados y hasta enfermos mentales con el objetivo de analizar los efectos de la penicilina para tratar estas enfermedades venéreas.
El vocero presidencial, Robert Gibbs, calificó esto como trágico y reprensible, y EEUU se disculpó con el gobierno de Guatemala, señala AFP. La Cancillería de Guatemala recibió informes sobre experimentos llevados a cabo en ese país entre 1946 y 1948 por el doctor John Cutler, oficial médico y especialista del Servicio Público de Salud de Estados Unidos.
El procurador de Derechos Humanos guatemalteco, Sergio Morales, coincidió en que se trata de delitos de lesa humanidad que continúan vigentes y se pueden sancionar legalmente, pero de momento no existe un fallo.
El precedente: Proyecto Tuskegee
Entre los años 1932 y 1972, Washington dio luz verde al llamado Proyecto Tuskegee, que consistía en realizar experimentos médicos con ciudadanos afroamericanos con la intención de hallar una cura a la sífilis y la gonorrea, entre otras enfermedades de transmisión sexual.
“U nos 600 naturales de Alabama fueron conejillos de indias de los médicos, entre ellos el doctor John Cutler, que años después sería el responsable del mismo proyecto en Guatemala”, explica al diario catalán Avui, el periodista e investigador histórico Andreu Llompart.
Llompart tuvo acceso a una serie de documentos relativos al proyecto y encontró, además, que esas personas fueron utilizadas sin pagarles un centavo, a pesar de la promesa del Gobierno de pasarles una pensión en caso de “efectos colaterales”. “A cambio debían guardar absoluta reserva sobre los detalles del experimento, e incluso fueron alejados de sus familias”, escribe Llompart.
Antecedentes
Nazis Al amparo del régimen de Adolfo Hitler, los médicos alemanes, en su mayoría genetistas como el doctor Josef Mengele, llevaron a cabo experimentos en busca del superhombre ario.
Estados Unidos Primero fue el Proyecto Tuskegee, en el sur del país, para investigar en seres humanos el efecto de la penicilina en enfermos de sífilis. Luego se llevó este experimento a Guatemala.
Unión Soviética Moscú desarrolló un programa especial orientado a la investigación genética. Se experimentó con presos políticos.
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